La Asociación de Los Niños de la Cruz protagonizó el primero de los cuatro desfiles que tuvieron lugar ayer en el municipio de Cieza. Desde hace ya más de 20 años, esta procesión está protagonizada por niños y jóvenes que llevan en las venas la Semana Santa de Cieza.

Tampoco faltó a la cita del Viernes de Dolores la Santísima Virgen de los Dolores con su traslado desde el Convento de San Joaquín hasta la Basílica; el vía crucis del Cristo de Medinaceli y la solemne procesión del Cristo de la Misericordia. En la Esquina del Convento, madre e hijo volvieron a reencontrase bajos los sones de una música celestial.

Ya de madrugada, la Cristo de la Misericordia se convirtió en el protagonista de las viejas calles del ciezano barrio de La Era sobre los hombros de los anderos. Jesús y su Cruz fueron trasladados desde la Basílica de Nuestra Señora de la Asunción hasta la Casa Museo de la Semana Santa.