El Ayuntamiento de Lorca y el Instituto de Fomento (Info) habilitarán con financiación europea zonas de sombra mediante la instalación de toldos en las calles peatonales Corredera, Pío XII y Alporchones, tres de las más transitadas del casco histórico. Ocurrirá en la primavera de 2018, según explicó ayer el alcalde, Francisco Jódar, quien destacó que se trata «de una medida destinada a reducir los efectos de las olas de calor mediante corredores en sombra en zonas de paso de particular concurrencia o recorridos clave dentro del entramado de la ciudad, como estas tres vías de carácter comercial».

Los toldos, que permanecerán colocados desde principios de primavera hasta final de verano, se fabricarán con membranas tensadas, de tejido ignífugo, con cubierta de base romboidal, con los cuatro anclajes a la misma altura y el montaje se realizará entre fachadas, sin mástiles intermedios. Se instalarán cáncamos en las fachadas para soporte del cable de acero galvanizado continuo que sustentará las lonas, que irán unidas a las fachadas con cordones de alta tenacidad y a la vez unidas entre ellas, manteniendo una separación entre las mismas de al menos 15 centímetros. Los toldos cubrirán la calle Corredera desde la Plaza de la Concordia hasta su confluencia con calle Álamo, así como la calle Pío XII, desde la unión con Corredera hasta la calle Lope Gisbert, zona a la que se añade la calle Alporchones, también desde Corredera hasta Lope Gisbert.

Jódar aseguró que la colocación de estos toldos había sido demandada por los comerciantes y señaló que parte de la financiación procederá de la iniciativa europea 'Life Adaptate', a la que a través del Info se han solicitado subvenciones. Esa estrategia europea pretende diseñar una metodología común para los planes de acción de energía sostenible y clima, una herramienta clave que contiene todas las acciones de los ayuntamientos para luchar contra el cambio climático, como sucede en Murcia.