El Fiscal ha pedido penas que suman casi dos décadas de cárcel para Ernesto A.F.M. y Jonathan F.F.M., de nacionalidad ecuatoriana, acusados de intentar matar a dos hombres cuando le llamaron la atención al ver que los procesados estaban golpeando los retrovisores de los coches en Molina de Segura.

Una de las víctimas, que barría la terraza de su local, llamó la atención de los acusados. Los procesados reaccionaron, se enzarzaron en un forcejeo pese a los intentos de las dos mujeres para separarlos. Uno de los procesados quedó en el suelo, retenido por las víctimas mientras llegaba la Policía Local, mientras que su hermano huyó a casa. Las mujeres resultaron heridas.

Una vez que llegó a casa Ernesto, le relató a su padre lo ocurrido, que trató de mediar para que soltaran a su hijo sin esperar a la Policía . Ernesto clavó repentinamente un cuchillo de cocina a una de las víctimas. En el ademán de volvérselo a clavar, la mujer de la víctima se arrojó hacia su marido para protegerlo. El acusado le propinó varias puñaladas también al dueño del bar que solo alcanzaron a rasgarle la camisa que vestía. También un policía resultó herido.

Otro caso a juicio en Molina

El fiscal pedirá también veinte años de prisión para Germán Horacio V.J., natural de Colombia, acusado de matar a un compatriota y dejar malherido a otro. El supuesto homicida y sus víctimas coincidieron en un parque y se inició una discusión. El procesado, al verles gesticular, se acercó al grupo y preguntó si lo estaban llamando, a lo que Brian Andrés P.C. respondió que estuviera tranquilo, que con él no iba nada. Según el fiscal, el acusado sacó un cuchillo y le asestó una puñalada que llegó al corazón, causándole la muerte. Apuñaló también a otro integrante del grupo, al que causó una herida.