El plan de control contra el mosquito tigre establecido por el Ayuntamiento de Lorca en colaboración con diversas entidades ha conseguido «reducir al mínimo» la presencia de este insecto en el municipio. Lo confirmó ayer la concejala de Sanidad, María del Carmen Ruiz, quien explicó que la durante campaña de detección de ejemplares que llevan a cabo los servicios técnicos municipales se ha constatado la práctica eliminación de la presencia del insecto. Durante el año pasado año se dispusieron un total de 130 trampas por toda la ciudad, de las que, tras su análisis, solo dos dieron positivo con presencia de colonias del mosquito tigre.

Se localizaron en la entrada del cementerio de San Clemente y en una vivienda particular ubicada en la carretera de Granada, aseguró Ruiz, que señaló que en el caso del cementerio la trampa volvió a dar positivo en la tercera recogida, pero tras proceder a una fumigación de la zona las muestras comenzaron a ser negativas. En el caso de la vivienda, volvió a dar positivo en la cuarta y en ese momento fueron eliminados los recipientes de agua para macetas que había en la casa y que servían de caldo de cultivo para la cría y proliferación de los mosquitos. Además se instalaron otras dos trampas para mosquitos adultos en la residencia geriátrica Domingo Sastre y en los jardines del Palacio de Guevara de las que se recogieron las bolsas de captura semanalmente desde el 20 de octubre hasta el 5 de diciembre sin que se haya detectado presencia de mosquito tigre en ninguno de los muestreos.

Pese al buen resultado de las pruebas, la concejala de Sanidad aseveró que los veterinarios municipales siguen en formación continua para combatir el insecto y que este mes han asistido al curso ´Vigilancia entomológica y control del mosquito tigre´, realizado por la Universidad de Murcia, para ampliar los conocimientos en cuanto a identificación de larvas y métodos de vigilancia y control. La concejalía de Sanidad inició también en 2016 una campaña de concienciación ciudadana para la eliminación de los lugares de cría, puesto que «la actitud de los ciudadanos es crucial para combatir esta especie», refirió Ruiz.

Para ello se editaron en coordinación con la consejería de Sanidad 5.000 folletos que se repartieron por el municipio, se impartieron charlas en colegios para alumnos de primero a tercero de Primaria y en el centro de educación de adultos Alto Guadalentín.