Ecologistas en Acción pondrá en marcha un proyecto para recuperar un humedal en el entorno del Mar Menor con el objetivo de mantener ese hábitat en el que vive el fartet, un pescado de pequeñas dimensiones considerado en grave peligro de extinción. El proyecto contará con la financiación de la Fundación Biodiversidad, dependiente del Ministerio de Agricultura y Medio Ambiente, y se llevará a cabo íntegramente en el municipio de San Javier, en concreto en las inmediaciones del camping Mar Menor, que también colabora con esa iniciativa.

Así, la asociación aprovechará el espacio que en el pasado ocupaba la antigua depuradora del camping para convertirlo en un humedal natural, para lo que demolerán esa infraestructura y eliminarán la vegetación invasora de la zona para sustituirla por especies autóctonas de los humedales, como los taray, que permitirán una mejor recuperación para el pez en peligro de extinción.

Después se restituirán las charcas hipersalinas que ocupaban esa zona y se liberarán allí algunos ejemplares de fartet, recuperando así un espacio degradado, y se llevarán a cabo actividades de difusión, participación ciudadana y voluntariado para dar a conocer la biodiversidad de la zona y convertirla en un factor de impulso al turismo. Según explica la ONG verde, el objetivo de esta actuación es favorecer el desarrollo del fartet y de otras especies animales y vegetales vulnerables mediante la restitución de su hábitat, que durante décadas ha sido transformado por el hombre y que ha afectado muy negativamente a la fauna autóctona del lugar.

Ecologistas en Acción recuerda que las grandes transformaciones que ha sufrido la ribera del Mar Menor «han perjudicado gravemente a la biodiversidad de este valioso y singular ecosistema», poniendo en peligro especies como el fartet o el caballito de mar.

Sin valor comercial

El fartet, recuerdan desde Ecologistas, es un pez de pequeño tamaño y sin valor comercial, endémico del sureste peninsular y en grave peligro de extinción, por lo que con esta actuación confían en recuperar un espacio degradado. El proyecto tiene un presupuesto de 39.000 euros de los que la Fundación Biodiversidad aportará algo más de 25.000.

Participarán también en la iniciativa el Departamento de Ecología e Hidrología de la Universidad de Murcia (UMU), la Oficina de Impulso Socioeconómico del Medio Ambiente de la comunidad autónoma, así como el Ayuntamiento de San Javier y la Estación Naútica del Mar Menor.