Agentes de la Guardia Civil detuvieron en Pliego a un portugués de 39 años sobre el que pesaba una orden de detención de su país y que fue sorprendido en un dispositivo de cierre de población, del que huyó y fue arrestado gracias a la actuación conjunta del helicóptero y patrullas terrestres de la Benemérita, informaron ayer fuentes de este cuerpo.

Sobre el arrestado pesaba una reclamación judicial de búsqueda, detención e ingreso en prisión por una causa pendiente en Portugal. Efectivos de la Unidad de Seguridad Ciudadana y del Servicio Aéreo de la Benemérita se coordinaron para llevar a cabo varios dispositivos en la comarca del Río Mula con el objetivo de velar por la seguridad ciudadana. En uno de estos dispositivos, concretamente un cierre de población desarrollado en Pliego, los agentes detectaron cómo un vehículo que se aproximaba a uno de los puntos de control realizaba un cambio de sentido de forma brusca y emprendía huida a gran velocidad del lugar.

Las patrullas terrestres y el helicóptero de la Guardia Civil, alertados por la inminente fuga, iniciaron un seguimiento sobre el vehículo por el casco urbano de la localidad y sus extrarradios hasta que éste llegó a un camino sin salida. Su conductor abandonó entonces el vehículo y emprendió huida a pie introduciéndose por un cañaveral, donde se intentó ocultar. Los guardias civiles iniciaron una batida por la zona, apoyados por el servicio aéreo de la Benemérita, que concluyó poco después con la localización del conductor fugado.

Tras identificar al fugado del control, los agentes realizaron las pertinentes comprobaciones y constataron que sobre éste pesaba una orden europea de detención basada en una requisitoria dictada por un juzgado portugués por una causa pendiente, por lo que finalmente se procedió a su detención. El arrestado, residente en Pliego, junto con las diligencias instruidas, fue puesto a disposición de la autoridad judicial competente.