La lluvia caída, a primera hora de la mañana, en Cehegín y la amenaza constante durante toda la jornada no fue impedimento para que en la plaza del Castillo resonaran malagueñas, pardicas y seguidillas, poniendo de manifiesto la importancia de la música de raíz en el Noroeste murciano. El acto, organizado por los animeros de Cehegín y el Consistorio de la población del Noroeste murciano, estuvo enmarcado dentro del popular mercado el Mesoncico, que en esta edición estuvo dedicado a los ´Sabores de otoño´, donde no faltaron el popular pero de alcuza y las castañas asadas.