Los vecinos de la céntrica y peatonal calle Alporchones se quejan de que en la citada vía son ya varias las caídas que se han registrado por parte de algunos viandantes. Uno de los motivos es el estado en el que se encuentran las letras de hierro de grandes dimensiones que se encuentran incrustadas sobre el pavimento formando la palabra 'alporchón', algunas de las cuales sobresalen unos centímetros del suelo, produciendo los consiguientes tropiezos.

El último de ellos, del que se tiene conocimiento, se produjo hace unos días, cuando una mujer que pasaba por allí tropezó sin darse cuenta en la letra 'H', que sobresalía sobre el firme, con el resultado de la rotura de metatarsiano (uno de los cinco huesos del pie) que la mantiene impedida para realizar sus tareas habituales.

Con el paso de los años las letras realizadas con hierro de grandes dimensiones se han ido despegando poco a poco al tiempo que se producía el desprendimiento del pavimento. La 'H' no es la única letra que ha dejado de estar sujeta al suelo, sino que hay otras que igualmente se mueven y sobresalen sus extremos produciendo algún que otro tropiezo.

Se trata de una calle peatonal muy transitada, de poco más de 50 metros de longitud. Es una vía de comunicación por la que pasan cada día varios centenares de personas que se dirigen a las entidades bancarias, comercios, bares y centros públicos que se encuentran ubicados en el entorno de la citada calle. Además, el estado de las letras no es el único problema que tiene la citada calle. Hay que añadir que el pavimento resbala siempre que llueve o pasan los servicios de limpieza.

La concejal de obras, Eulalia Ibarra, ha dicho a este periódico que en los próximos días se va a proceder a la sujeción y arreglo de las letras y que se tomarán medidas para está situación no se vuelva a repetir.