La Cruz de cristo, como signo de vida, y la figura de la madre, en la advocación de la Virgen del Rosario, dos símbolos tan importantes dentro del mundo cristiano, estarán más unidos, si cabe, gracias al hermanamiento entre la cofradía de la Vera Cruz de Caravaca y la hermandad de la Virgen del Rosario de Bullas.

El acto tuvo lugar ayer en Bullas tras la celebración de la eucaristía, que estuvo presidida por el obispo de la Diócesis, José Manuel Lorca Planes, quien durante su homilía alentó al pueblo de bullas «a caminar con paso firme en la vida de la fe, de la mano de nuestra Madre del Cielo»

El acto contó con la presencia del presidente del Ejecutivo Regional, Pedro Antonio Sánchez, y de los alcaldes de Bullas y Caravaca, Mª Dolores Muñoz y José Moreno..

El acto de hermanamiento, enmarcado dentro de las fiestas patronales, fue firmado por los máximos responsables de ambas instituciones religiosas, José Antonio Martínez y Elisa María Giménez-Girón. Posteriormente la delegación caravaqueña regaló un pectoral con la Cruz de doble brazo, una obra de orfebrería en filigrana y bello cordón elaborado en pedrería e hilo de seda plata y rojo, que lució la imagen mariana durante la solemne procesión que tuvo lugar por la noche. También la cofradía Bullera regaló una réplica de la patrona del municipio, tanto a la Cofradía como al consistorio caravaqueño.