El balance del servicio de comedor escolar de verano gratuito para menores de familias con falta de recursos económicos se ha cerrado con menos asistencia de lo previsto, aunque desde la concejalía de Bienestar Social valoran positivamente el desarrollo del mismo. Así, el mes de julio comenzó con un número total de 57 menores, que han asistido de manera regular con algún altibajo en días sueltos. Por su parte, en el mes de agosto la concurrencia fue de 49 menores, con modificaciones en días puntuales, en los que la afluencia ha descendido. Las causas por las que han dejado de asistir son diversas. Entre las más comunes, irse con familiares a veranear unos días o, en el caso de los menores marroquíes, desplazarse a su país a ver a su familia. El servicio, sin embargo, fue contratado inicialmente para 64 comensales cada mes.