«No hay miedo», tiene claro Antonio Jiménez, residente en Fuente Álamo y miembro de las patrullas vecinales nocturnas que operan en la zona, ante la gran cantidad de robos violentos que, denuncia, vienen sufriendo.

El pasado viernes, después de que una pareja de avanzada edad fuese asaltada en su casa -en el paraje de Nazaret­- por un grupo de hombres, «salieron vecinos armados hasta los dientes, con escopetas, buscando a ver quiénes habían sido», confesó Jiménez. La búsqueda fue infructuosa.

Sí ha habido, no obstante, detenciones en los últimos días, según este vecino. «Nos ha contado el alcalde que la Policía Local pilló de noche a tres en un camión, que estaban buscando casas para robar», manifestó. Sin embargo, la sensación de desamparo es constante. «Estamos desprotegidos por nuestro propio Gobierno y nuestras propias leyes», hizo hincapié Antonio Jiménez..

El regidor de Fuente Álamo, Antonio Jesús García, se reunía ayer con vecinos afectados y les mostraba su apoyo. «El alcalde está por la labor», relataban luego estos vecinos, que vivían la última oleada de robos coincidiendo con las fiestas de la localidad.

Por este motivo, los afectados acordaron convocar una manifestación en Murcia. La fecha que barajan es el próximo lunes 12 de septiembre, ya que «hay que pedirlo con tiempo». Sería un día antes de la romería de la Fuensanta.

La idea es hacerla frente a la delegación del Gobierno -cuya sede está en obras: las dependencias se hallan, de forma provisional, en el edificio de usos múltiples de Alfonso X- y para mover gente plantean fletar seis autobuses. «Con sólo un tercio de las personas a las que nos han robado, ya se llenarían», calculan los afectados. «No queda ni una nave en la que no se hayan metido», agregan.