La Audiencia Provincial de Murcia ha condenado a dos años de prisión y al pago de una multa de 1.620 euros a un joven que abusó de dos menores cuando estas participaban en una fiesta de cumpleaños que se celebraba en un local próximo al estadio de fútbol Sánchez Cánovas de Molina de Segura.

El relato de hechos probados que recoge la sentencia, señala que los mismos ocurrieron en la madrugada del doce de octubre de 2014, cuando el acusado, natural de un país sudamericano, se acercó a las niñas, que tenían entonces 15 y 12 años de edad, y las sometió a diversos tocamientos.

La sentencia añade que los padres recriminaron su conducta, tras lo cual, abandonó el lugar, aunque fue perseguido por agentes de la Policía Local, que le dieron alcance a una distancia aproximada de 500 metros.

El tribunal, a la hora de condenarlo como autor de dos delitos de abusos sexuales, le aplica la atenuante de embriaguez, y lo condena a las citadas penas de cárcel y multa y dicta una orden de alejamiento a una distancia de 200 metros respecto de las víctimas durante cinco años.

La Audiencia no estima el recurso de su defensa, que había reclamado que la embriaguez fuese apreciada como eximente.

Respecto a ese extremo, el tribunal, que tiene como ponente al magistrado Jaime Bardají, dice que se ha demostrado que iba bebido, pero no hasta el punto de que la ingesta alcohólica le impidiera por completo conocer las consecuencias de lo que hacía.

Tampoco ha prosperado otro alegato del acusado, que aseguró que desconocía que las perjudicadas eran menores de edad.