La Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de la Región (TSJ) ha desestimado el recurso presentado por una empresa de Molina de Segura contra la sentencia de un Juzgado que declaró improcedente el despido de una trabajadora, a la que acusó de hacerle la competencia desleal.

El Juzgado de lo Social condenó a la demandada a readmitir a su empleada despedida o a pagarle una indemnización cercana a los 14.000 euros.

En la carta de despido, la empresa expuso que su trabajadora llevaba a cabo actividades que suponían una competencia desleal y que usaba bienes de la empresa para fines particulares.

El TSJ señala que no se han demostrado los hechos que habrían justificado el despido procedente.