Más de medio centenar de personas se congregaban en el convento del Carmen de Caravaca para celebrar el décimo aniversario de la peregrinación a Jerusalén, donde el custodio de Tierra Santa entregó a la cofradía de la Vera Cruz el tercer Lignum Crucis que se custodia y venera dentro del relicario de la Vera Cruz. Un acto de entrega que contó con la participación directa de la Universidad Católica de San Antonio.

Tras una recepción en el Patio de Lourdes del convento, los peregrinos se trasladaron hasta la Basílica Santuario, donde participaron en una eucaristía presidida por el vicario, Jesús Aguilar; el superior de los Carmelitas, Pascual Gil OCD; el rector del Seminario neucatecumental, Diego Martínez, y el sacerdote encargado de custodiar la reliquia desde Tierra Santa hasta la Ciudad Santa del Noroeste murciano, el capellán emérito, Pedro Ballester.

Los actos concluyeron con una comida de hermandad en los salones Castillo de la Cruz.

Nuevos estatutos

El cabildo de la cofradía de la Vera Cruz aprobaba por aclamación de sus asistentes la aprobación de los nuevos estatutos, que regirán conforme a derecho canónico las institución religiosa encargada del culto y la promoción del Lignun Crucis.

Durante la pasada semana se levantó una polémica a través de las redes sociales sobre el capítulo que regía la comisión de Festejos encargada de organizar las fiestas en honor a la patrona, durante la primera semana de mayo. En un receso del cabildo, la hermana mayor de la Cofradía, Elisa María Giménez-Girón, mantuvo un encuentro con los representantes festeros, que llegaron al acuerdo de dejar dicho capítulo para que estuviera regulado en un posterior reglamento de régimen interno. Por lo que finalmente con el beneplácito de todos los asistentes, no fue necesaria la votación y el nuevo texto legal fue aprobado a expensas del visto bueno definitivo de la Diócesis. En las próximas semanas se abre el plazo de candidaturas para la elección del nuevo hermano mayor.