Un centenar de vecinos de los barrios de San Diego, San Cristóbal y Apolonia, secundados por colectivos como los Yayo Flautas y representantes políticos de PSOE, IU y Podemos, protagonizaron ayer una sonora cacerolada en la plaza de España de Lorca contra el cierre del servicio de urgencias que se prestaba en el centro de salud de San Diego y su traslado a Sutullena.

Los manifestantes, que corearon lemas como «las urgencias no se cierran» hicieron sonar silbatos mientras golpeaban cacerolas de cocina y tapas de olla a modo de platillos, tras una pancarta en la que podía leerse 'Los recortes en sanidad matan'.

La portavoz de los manifestantes y presidenta de la asociación Vecinos Rabaleros, Fermina Giner, recordó que ayer se cumplía una semana del inicio de los actos de protesta contra el cierre y traslado del servicio al centro de salud Lorca-Sutullena.