Dos personas, un hombre y una mujer de mediana edad, eran encontrados en la tarde del sábado muertos en su domicilio, ubicado en una zona próxima al Club Hípico de Caravaca, conocido como el Rincón de Guitarra.

Se trata de una zona aislada en plena huerta caravaqueña. El hallazgo de los cuerpos sin vida de la pareja sentimental se producía sobre las tres de la tarde, cuando un vecino encontraba el cadáver de la mujer entre los dos vehículos de la pareja, que estaban aparcados en la entrada de la vivienda.

El propio vecino era quien alertaba a la Guardia Civil del hallazgo. Hasta el lugar de los hechos se personó inmediatamente Guardia Civil, Policía Local de Caravaca y una ambulancia medicalizada del 112, que únicamente pudo certificar el fallecimiento de las dos personas.

Se trata de José N., vecino de Archivel, de 52 años de edad, conocido como ´El Parrier´ y pastor de profesión, y su actual compañera sentimental, de unos cuarenta años, cuyo nombre responde a Encarna y es natural de Vélez Rubio (Almería).

Sorprendidos al llegar al hogar

Según las primeras investigaciones, ambos fueron sorprendidos al llegar a la vivienda, según se desprendía de la posición de los cadáveres. El varón apareció sin vida junto a su coche y la mujer tenía signos de haber estado huyendo y finalmente cayó abatida entre los dos vehículos. Ambos presentaban heridas por arma de fuego.

Sobre las ocho de la tarde llegaba la Policía Forense del Instituto Armado, junto con la juez titular del Juzgado número dos de Caravaca, que durante el día de ayer se encontraba de guardia.

Tras la toma de muestras periciales, se ordenó el levantamiento del cadáver y su posterior traslado hasta el Instituto Anatómico Forense de Murcia, donde les será practicada la autopsia. El juzgado también decretó el secreto de sumario.

El alcalde de Caravaca, José Moreno, acompañado del edil de Seguridad Ciudadana, Pedro Antonio Muñoz, estuvieron presentes durante toda la tarde en el lugar de los hechos.

Excluyen la violencia doméstica

Moreno confirmó que «se ha constatado que no se trata de violencia de género, sino de un homicidio perpetrado por una tercera persona», matizando que «los agentes no han encontrado ninguna arma de fuego en el lugar de los hechos, por lo que se descarta que pueda ser un caso de violencia de género con posterior suicidio».

Durante toda la noche, tres agentes estuvieron vigilando el lugar de los hechos y hoy proseguirán con la investigación para intentar dar con los culpables y ponerlos a disposición judicial.

Aunque se ha decretado secreto de sumario, la Guardia Civil mantiene varias vías de investigación abiertas, sin descartar ninguna posibilidad, desde un robo hasta un ajuste de cuentas.

Al poco de conocerse la noticia, la familia del varón se personó en las inmediaciones de la vivienda, que tiene anexo un corral de ganado. Aunque actualmente no mantenían una relación cercana -desde que José N. se separó de su primera mujer-, mostraron su impotencia al conocer lo sucedido.

Según conocía este diario, hace años ya tuvo problemas que no se llegaron a determinar cuando trabajaba como pastor en una finca en la pedanía lorquina de la Parroquia.

La triste noticia corrió como la pólvora en toda la ciudad, que vivía una jornada festiva, y donde los caravaqueños mostraron su conmoción tras conocer los dramáticos hechos.