Timbales y truenos de arcabucería fueron los prolegómenos del Día del Moro en el Ciudad Santa del Noroeste murciano. Una jornada que estuvo marcada por las miles de personas que se concentraron en el campamento moro, ubicado en la Gran Vía caravaqueña, para vivir una jornada de convivencia.

Tras la tradicional diana, los Sultanes del Bando, Víctor López y su hija Cristina, acompañados de los Príncipes de Al-Ándalus, Diego Robles y Gabriela López, fueron los encargados de inaugurar el campamento moro, donde se degustó la tapa moruna y caña.

Tras las comidas de hermandad, que organizan las once Kábilas que conforman el bando moro, en sus distintos refugios y restaurantes de la ciudad, la fiesta continuó en la degustación del Café y posteriormente en la zona del Supremo, donde el bando instaló dos escenarios con música en directo y DJ.

Al caer la tarde la fiesta prosiguió en la gran Vía con la actuación de la orquesta Liverpool y el musical "Hoy no me puedo levantar". Una fiesta que se prolongó hasta bien entrada la madrugada.

El calendario festero continua este domingo, con el traslado de Santa Elena, desde la iglesia Mayor de El Salvador hasta la Basílica Santuario, a partir de las 10 de la mañana. La imagen pasará por el barrio del Hoyo, cuna del festejo, donde en la ermita que lleva su nombre recibirá la bendición acompañada de todos los banderines del bando.

Una vez en la Basílica se celebrará la misa ofrenda del Bando de los Caballos del Vino y posteriormente tendrá lugar el sorteo de número que usarán los caballos del vino para acceder al castillo en la mañana del dos de mayo.

Por la tarde, a partir de las 7, los Salones Castillo de la Cruz acogerán la presentación de una nueva edición de la Revista El Caballista, editada por la Peña Júpiter.