Después de que LA OPINIÓN informara esta semana de que el arquitecto municipal de Pliego, Antonio Botía, está siendo investigado por la Fiscalía por presunta falsedad documental en los informes relacionado con la construcción de un muro en una empresa privada de almacenaje y distribución de frutos secos de la localidad, este periódico ha podido conocer que tres policías locales, de los cinco que componen la plantilla en el municipio de Pliego, fueron investigados por el Ministerio Fiscal, imputados y llamados a declarar ante el juez también por falsedad documental, en este caso en relación a unos documentos relacionados con la obra de una vivienda particular.

La apertura de esta causa, que tenía lugar en diciembre de 2014, fue notificada a los implicados y el consistorio pleguero el pasado mes de julio. A pesar de ello, la misma no había trascendido a la prensa y actualmente se encuentra abierta y a la espera de que se dictamine la sentencia, según aseguran fuentes cercanas al caso.

Al parecer, los informes relacionados con la obra en cuestión, que eran competencia de la Policía Local, no se corresponden con los informes dictaminados desde la concejalía de Obras y Servicios, lo que llevó a solicitar la investigación por parte de Fiscalía, causa que posteriormente fue acogida por el Juzgado.