La portavoz del PP en el ayuntamiento de Molina de Segura, Sonia Carrillo, lamentó ayer que el Consistorio esté «paralizado» desde el nombramiento hace una semana de la nueva alcaldesa, la socialista Esther Clavero, que se ha atribuido todas las competencias municipales sin delegar en sus compañeros, algo que considera un «disparate» e «imposible» de gestionar «por mucho que sea 'superwoman'».

Esto demuestra, en su opinión, que la nueva alcaldesa «no tiene un proyecto» para Molina y que en su toma de posesión «no primaban los intereses del municipio, sino hacerse con el sillón, acomodarse y, a partir de ahí, decidir qué se hace».

Carrillo recordó que el PP, a pesar de ser la lista más votada en Molina en las pasadas elecciones, ha sido «expulsado» del Gobierno a la oposición: «Todos los grupos han dado sus votos al PSOE para que haya una alcaldesa de este signo político».

Todas las atribuciones

Carrillo recordó que hay un escrito del 31 de marzo, en el que la secretaria general del Ayuntamiento informa que todas las áreas y competencias que antes estaban delegadas en la Junta de Gobierno y en concejales, ahora residen en la alcaldesa.

«Es increíble que una semana después tengamos un Ayuntamiento paralizado, porque es imposible que la cuarta ciudad de la Región, con 70.000 habitantes, tenga concentradas en una persona todas las delegaciones y atribuciones de todos los concejales de todas las áreas de todo lo que concierne al municipio». Lamentó que el municipio esté gobernado «a base de decreto, algo que nunca ha pasado en democracia».