El político socialista Miguel Navarro Molina, exalcalde de Lorca durante 13 años y presidente de la Asamblea Regional durante seis, ha fallecido a primera hora de la mañana en su domicilio familiar a los 64 años, al parecer como consecuencia de un ataque cardiaco, según fuentes cercanas a la familia.

Navarro (Lorca, 1952), casado y con cinco hijos, era profesor de Educación Primaria y Pedagogía Terapéutica, aunque no ejercía, y permanecía apartado de la vida política desde el año 2007.

Llegó a la alcaldía de Lorca en 1993, heredando el puesto de su antecesor en el cargo, el exsenador José Antonio Gallego, que luego se convirtió en uno de sus principales azotes políticos y que en los meses previos a su dimisión le recriminó su paulatino alejamiento de la disciplina del PSOE.

Se afilió al PSOE y a UGT en 1976 y antes de tomar el bastón de mando del ayuntamiento de Lorca fue presidente de la Asamblea Regional de Murcia entre 1987 y 1993.

Durante sus dos mandatos en el Parlamento regional concentró sus esfuerzos en la reforma del reglamento de la cámara y tendió puentes hacia la sociedad, mediante proyectos de colaboración con entidades regionales de reconocido prestigio como la universidad.

En ese período como presidente vivió en primera persona la quema de la sede parlamentaria el 3 de Febrero de 1992, tras los disturbios que se produjeron en aquella fecha, con motivo de la conflictividad laboral existente en la ciudad de Cartagena.

Su legado como alcalde

Tras su llegada al Ayuntamiento trabajó para la reconversión del modelo socioeconómico del municipio con el objetivo de diversificar la economía local y dar más protagonismo al sector terciario ante el exceso de peso del primario.

Su política de convenios urbanísticos para propiciar desarrollos turísticos y residenciales y su apoyo a la política de trasvases como solución al déficit hídrico de Lorca le fue apartando de la disciplina de su partido en los últimos años y en 2003 dimitió, tras 20 años de pertenencia al mismo, de su puesto en el comité federal del PSOE.

Cercano en el trato, polémico y controvertido en muchas de sus declaraciones, durante sus años de actividad política despertó a partes iguales críticas y adhesiones y su presencia fue habitual en la lista de personajes más influyentes de la Región de Murcia en los últimos lustros.

Su último cargo público fue el de diputado regional, que mantuvo hasta los comicios autonómicos de mayo de 2007.

Detenido por corrupción

El 26 de junio de 2009 cuando fue detenido por su presunta implicación en una trama de corrupción destapada en el seno de la empresa de limpieza Limusa, aunque meses después el Ministerio Público retiró la acusación contra él al haber prescrito el delito de malversación que se le imputaba.

El último acto político en el que se le pudo ver fue en acto central de campaña del PSOE en las municipales de 2015, saludando al exvicepresidente del Gobierno Alfonso Guerra.