A hombros de sus costaleros, la Virgen del Milagro regresó a su ermita de Bolnuevo, tras recorrer en romería y en compañía de miles de personas la distancia que separa Mazarrón de la pedanía de pescadores.

Pasadas las ocho de la mañana salía del Santuario de la Purísima junto a un río creciente de romeros entre los que se hallaba la alcaldesa de Mazarrón, Alicia Jiménez, miembros de la corporación municipal y el párroco de San Andrés y San Antonio, Francisco José Hernández. La banda de música animó el recorrido que cumplió con sus habituales paradas en Las Moreras y en la desaladora Virgen del Milagro, donde como es habitual, se ofreció un almuerzo a los romeros.

Pese a la brusca bajada de temperaturas, el fervor y la alegría volvieron a ser las notas dominantes entre las miles de personas que han hecho el recorrido hasta llegar a la playa de Bolnuevo donde se ofició una misa en honor a la Purísima. A su término la imagen regresó a su ermita entre vivas, aplausos y pétalos de rosa. Tampoco faltaron los característicos trovos de los miembros de la Asociación Virgen del Milagro.

Y ya una vez la Virgen en su ermita, los romeros y los miles de visitantes que acudieron a Bolnuevo terminaron disfrutando de una entrañable jornada de convivencia en la playa con la degustación de sardinas asadas, arroces y migas. A lo largo del día se repitieron estampas únicas en lo que muchos de los vecinos reconocen como «uno de los rincones más bellos de la Región de Murcia».

Policía Local y servicios de emergencias municipales más la Guardia Civil velaron por el buen transcurso de la jornada, finalmente desarrollada sin incidencias destacadas. Los servicios locales movilizaron más de 40 personas que trabajaron por que el día de romería y disfrute se llevara a cabo con tranquilidad. Un puesto sanitario avanzado instalado junto a las Gredas se vio reforzado con dos ambulancias, un camión de bomberos, tres todoterrenos y un quad.