El alcalde de Blanca, el socialista Pedro Luis Molina, ha confirmado que su equipo ya está trabajando en la elaboración de un nuevo proyecto para la construcción de un puente rodado para vehículos y peatones en el mismo emplazamiento que la «fallida pasarela» que iba a construir el Gobierno de España a través de la empresa pública Acuamed.

Según el regidor, se trata de una infraestructura «mucho más necesaria y cuyo proyecto está ya en fase de elaboración». «Estamos dando los primeros pasos con ingenieros de caminos y arquitectos para que las obras puedan ser una realidad cuanto antes», explica Molina, que además asegura que los técnicos municipales «están introduciendo las modificaciones oportunas en el nuevo Plan General de Ordenación Urbana, ya que el proyecto se adaptó al antiguo plan».

Además, Molina asegura que está estableciendo conversaciones con distintos organismos en aras de conseguir la financiación necesaria que necesita el proyecto. Molina desvela que la nueva pasarela «no será solamente peatonal, sino que podrán rodar vehículos».

El alcalde ha querido salir al paso así de las acusaciones vertidas por Acuamed, que hace unos días emitía una nota de prensa culpando al Gobierno blanqueño, compuesto por PSOE y Blanca Puede (Podemos), de haber dejado perder más de un millón de euros destinados a realizar estas obras dentro del proyecto de Regeneración Ambiental del Segura.

Al respecto, Molina señala que «el convenio con Acuamed comprometía seriamente las arcas municipales, ya que los sobrecostes, el mantenimiento y cualquier imprevisto de la obra recaen sobre el erario local» y recuerda que, con fecha de 22 de septiembre, se reunió con el consejero de Hacienda y Administración Pública, Andrés Carrillo, con quien trató de la financiación del proyecto, que el Consejero «se comprometió a impulsar» con apoyo financiero en los presupuestos de la Comunidad Autónoma de 2016.