Agricultores y ecologistas de Cieza han llegado a un acuerdo para regular, a medio plazo, las quemas de los restos de poda en los campos del municipio. Representantes de ambos colectivos mantuvieron una reunión este lunes en el Ayuntamiento con los concejales de Agricultura y Medioambiente del gobierno tripartito, Antonio Moya (PSOE) y José Eduardo Illueca (IU). Como primera acción, las dos concejalías trabajarán para concienciar al agricultor sobre la necesidad de realizar una separación selectiva de los residuos, e incluso se planteará la posibilidad de crear un nuevo servicio municipal para transportar los restos que se generen en las fincas pequeñas a otras de mayor capacidad donde es posible triturar sin necesidad de quemar, sirviendo de abono y de capa impermeable para los cultivos.

De cara a las quemas de pacas de paja que los agricultores realizan para evitar las heladas en los meses de enero y febrero, el Consistorio cree necesario implicar a la Administración regional, que, a juicio del edil de medioambiente, José Eduardo Illueca, «es la entidad que tiene competencias en temas de vigilancia de contaminación atmosférica». Antonio Moya, titular de Agricultura, explicó tras la reunión que su concejalía estudiará la posibilidad de instalar nuevos puntos de toma de temperatura en los campos de Cieza con objeto de conocer de manera precisa cuándo es necesario realizar quemas.

Manuel Martínez, presidente de Coag en Cieza, se congratuló de «de esta primera toma de contacto en tres años», y destacó que los episodios de quemas de estos últimos días «corresponden a lugares muy concretos y a pequeños agricultores que no tienen medios para adquirir un equipo de trituración». Martínez insistió en que «el 95 por ciento de agricultores disponen de equipos de trituración», y no dudó en ponerlos a disposición de aquellos que no pueden disponer de uno de ellos. Antonio Moreno, de UPA, insistió en la necesidad de llegar a un acuerdo y recalcó que la agricultora «constituye el principal motor de la economía en la Vega Alta y que, en ocasiones, estas prácticas son absolutamente necesarias para subsistir».

José Antonio Herrera, portavoz de Ecologistas en Acción, insistió en la necesidad de que políticos y agricultores se conciencien «de que existe un problema que hay que solucionar, aunque sabemos que se necesita tiempo». No obstante, exigen que, mientras se buscan soluciones, «es imprescindible avisar a la población cada vez que vaya a haber una quema masiva».