Ni se va a hacer en breve ni se espera hacerlo «en meses o años». El alcalde de Totana, Juan José Cánovas, de IU, ha querido aclarar cualquier duda sobre el prometido (por el anterior equipo de gobierno, del PP) monumento a las cofradías de la Semana Santa de la localidad, una obra que el primer edil no está dispuesto a llevar a cabo «cuando no hay ni un céntimo en las arcas municipales y hay muchas necesidades básicas más urgentes y necesarias por cubrir en el municipio de Totana».

Así lo ha declarado en un las redes sociales, en las que es muy activo, sobre todo teniendo en cuenta que dicho monumento tendría un coste superior a 130.000 euros, un presupuesto demasiado elevado para la maltrecha economía municipal.

La escultura en cuestión se instalaría en la rotonda del puente de la Kabuki, una obra que el propio alcalde ha calificado de «faraónica» ya que tiene «un exceso de obra superior a 600.000 euros y más de 6 años de retraso».

«Si no se puede en meses o años, no creo que eso sea algo que vaya a empeorar la situación de Totana. Si se hace ahora, sin dinero, es muy posible que no podamos pagarla y nos genere problemas añadidos a los gravísimos que nos estamos enfrentado en la actualidad. Si a eso añadimos que el Ayuntamiento, arrastra una deuda (actualmente) con el Cabildo Superior a los 32.000 euros, podemos colegir que estamos frente a un disparate más de los muchos a los que hacemos frente», añadía Cánovas en las redes sociales.

«Lo siento mucho -añadía Cánovas- pero este alcalde, mientras no pueda regularizar pagos al Servicio de Ayuda a Domicilio, a los Dependientes, a las familias que no pueden comprar libros a sus hijos, las deudas a empresas que tienen serias dificultades para abonar nóminas a sus trabajadores... Sinceramente, lo primero es lo primero. Si no puedo hacer o inaugurar monumentos, pues no pasa nada. No necesito placas ni homenajes».