¿Cómo se siente al ser la primera mujer que asume la alcaldía en el ayuntamiento de Bullas?

He sido concejala durante ocho años, de 2003 a 2011, pero ser alcalde es otra cosa. El primer día sentí que no había dejado de ser concejal, pero me bastaron 48 horas para ponerme el traje de alcaldesa y ver que las responsabilidades van más allá.

¿Esperaba que los ciudadanos apostaran por cambiar de partido?

Lo esperábamos ansiosamente, aunque la realidad nos decía que habíamos perdido las elecciones hacía sólo cuatro años por una diferencia importantísima. Después de 32 años de gobierno y haber perdido en 2011 pensábamos que recuperar la confianza iba a ser difícil, pero hicimos un trabajo importante como oposición, fuimos responsables, discretos y pacientes.

¿Cómo encontraron el Ayuntamiento a su llegada al poder?

He necesitado poner las cosas en su sitio, sobre todo en lo que se refiere a tener muy claro cuál es la situación económica. Cuando las cuentas estén claras se darán a conocer a los ciudadanos, pero sin ninguna otra intención que partir de cero, sobre todo con aquellos servicios básicos que sufragan los ciudadanos de manera más directa.

¿Habría posibilidad de municipalizar alguno de estos servicios?

La posibilidad existe cuando alguna de estas empresas no funciona con la garantía que se espera. Cuando algo se privatiza es para que funcione mejor, y en eso estamos, analizando que funcionen de la mejor manera para los ciudadanos.

¿Qué opina de la llegada de nuevos partidos al panorama político local como es el caso de Vecinos por Bullas?

Creo que tienen toda la legitimidad del mundo a presentarse a las elecciones. Con Vecinos por Bullas no habrá problemas de entendimiento. Con ellos hay que valorar el respeto absoluto a la elección, ya que tienen representación municipal, y además el hecho de que una nueva fuerza política aportará otros valores que puede ser bueno para el resto.

¿Cuáles son las principales necesidades que hay que afrontar en Bullas?

Sin lugar a dudas el empleo. Es el momento de pedir que se pongan en marcha muchas más iniciativas y líneas de actuación en torno al empleo porque es lo que garantiza el desarrollo de una vida con normalidad. En Bullas el Vivero de Empresas se encuentra en un punto muerto, tenemos el edificio pero no el contenido y el contenido sin ningún tipo de ayuda es muy difícil que se pueda poner en marcha.

El hecho de que el partido socialista gobierne en gran parte de los municipios del Noroeste y Río Mula, ¿en qué puede beneficiar?

Es una oportunidad sin antecedentes. Es un momento sin excusas, debemos estar muy unidos y tenemos la obligación de coordinarnos en torno al empleo, los servicios sociales, los servicios turísticos o la seguridad ciudadana que es un hecho que nos preocupa a todos y sobre los que cada vez estamos perdiendo más competencias. Este es el momento pero, ya no sólo con los alcaldes de mi grupo, sino del color que sea.

Su grupo apoyó en la pasada legislatura la cesión de unos terrenos municipales para la puesta en marcha de un centro comercial, ¿seguirán con el proyecto?

Esta oferta quedó sobre la mesa ante las críticas de una parte importante de la población. Mi intención ahora no es retomarlo ni mucho menos. La ciudadanía, en este caso los comerciantes, hablaron al respecto. Mi intención desde el principio hasta el final es que los ciudadanos digan lo que quieren que se haga con esos terrenos. La oferta quedó guardada y yo no tengo ninguna intención de sacarla de nuevo.

¿La participación ciudadana tendrá mucho que ver en su legislatura?

Queremos ahondar en esa participación para que haya la mayor transparencia pero, queremos hacerlo bien. La Comisión de Fiestas tendrá participación en 2016 y lo mismo queremos hacer con el consejo asesor y las distintas mesas participativas que ya estaban implantadas en el municipio y que hay que retomar, igual que los órganos que tienen que ver con la Ruta del Vino. Estas iniciativas están ahí, pero hay que enlazarlas todas y ponerlas dentro de un Plan Integral.

¿Tiene previsto desarrollar alguna gran actuación durante esta legislatura?

El gran proyecto siempre es de un modo u otro conseguir puestos de trabajo pero sí es verdad que queremos modificar algún espacio de los que tengamos en Bullas y poner en marcha un gran centro multiusos para fiestas y otros muchos eventos. En el municipio hay un movimiento cultural enorme, tenemos músicos, coral, teatro y hay ocasiones en los que la Casa de Cultura se queda pequeña para este tipo de cosas. Pero también me interesan otras cosas como la rehabilitación de espacios naturales, el margen del río, etc.

¿Qué espera de los próximos cuatro años?

Espero que sean cuatro años de demostración de que la política significa gestionar bien, con sentido común. No estamos en una época para hacer grandes cosas, el dinero hay que racionalizarlo al máximo. Es tiempo de demostrar que una nueva generación en todos los partidos es capaz de hacer una nueva política, de mucha más tranquilidad, de mucho más sentido común y de sentar lo pies en el suelo, y decir que podemos ayudar a los vecinos hasta que las fuerzas y el dinero nos lo permitan.