Cuatro Bomberos resultaron intoxicados y unos 50 vecinos tuvieron que ser desalojados ayer en la calle Hospital de Yecla mientras que dos ancianos fueron atendidos por sendos ataques de ansiedad, por la rotura de una tubería de gas.

El suceso tenía lugar poco antes de las nueve de la mañana cuando una máquina excavadora, que trabaja en las obras de urbanización que el Ayuntamiento desarrolla en la calle Hospital, esquina con la céntrica calle Lucio, rompió la tubería de gas que atraviesa la zona. El gas comenzó a manar al exterior con gran rapidez por lo que el Ayuntamiento a través de la Policía Local optó por ordenar el rápido desalojo de los vecinos que residen en esta calle afectando a un total de quince bloques de viviendas, según fuentes municipales.

Asimismo se dio aviso a los bomberos del Consorcio del Extinción de Incendios del Parque de Yecla, que procedieron a taponar la rotura para evitar que siguiera saliendo gas mientras Policía Local y Protección Civil acordonaban la zona.

También intervino la Cruz Roja y se envío una UME para asistir a los afectados que precisaran atención sanitaria. La zona permaneció acordonada durante más de tres horas, tiempo durante el cual los vecinos fueron realojados en casas de familias y en dependencias municipales, mientras otros pedían 'cobijo' en bares de la zona.

La exposición al gas provocó que cuatro de los bomberos que participaron en las tareas de control del escape tuvieron que ser atendidos por intoxicación. Otros dos vecinos de avanzada edad fueron atendidos por crisis de ansiedad, aunque no hubo que lamentar mayores daños personales.

La empresa responsable del suministro fue informada rápidamente de la rotura y colaboró en las tareas de reparación de la avería, según las mismas fuentes. En total, en la zona trabajaron una veintena de efectivos.

Los vecinos pudieron regresar a sus domicilios pasado el mediodía, una vez que los bomberos comprobaron que las viviendas ya estaban libres de gas y en condiciones de habitabilidad.

La consejera de Presidencia, María Dolores Pagán, se desplazó a la zona pasadas las doce del mediodía, donde se encontró con el alcalde de Yecla, Marcos Ortuño. Según la consejera, afortunadamente, al final todo se quedó en un susto gracias a la rápida intervención de los servicios de emergencias y a que el protocolo funcionó a la perfección.