Todos a una, como Fuenteovejuna. Así votaron en el último pleno celebrado en Yecla los tres grupos municipales con representación en el Ayuntamiento (PP, PSOE e Izquierda Unida) para sacar adelante una moción con la que muestran su rechazo al uso de la técnica conocida como 'fracking' en «el ámbito de influencia de los acuíferos que abastecen el municipio».

Asimismo, en la moción aprobada se establece que el Ayuntamiento adoptará las medidas que legalmente sean posibles «para que en el Plan General de Ordenación Urbana se especifique la incompatibilidad de desarrollar 'fracking' (conocida técnicamente como fracturación hidráulica y que se utiliza para facilitar la extracción de gas y petróleo) en el término municipal de Yecla, así como introducir en las distintas normativas municipales, medidas detalladas que limiten esta práctica».

Y no se quedan aquí. El pleno de Yecla también solicitará el Gobierno de España que «deseche esta técnica dentro del Estado español y de la Región de Murcia o, en su caso, que elaboren una normativa específica que garantice el cumplimiento de todas y cada una de las recomendaciones publicadas por la Unión Europea».

Este acuerdo, sin embargo, constituye más una declaración de intenciones que una prohibición en sí ya que los ayuntamientos no tienen potestad para regular en este tipo de procedimientos, una competencia que recae bien en las administraciones regionales y la estatal. Al respecto, el Ministerio parece haber dejado claro su apoyo al uso del 'fracking', lo que supone una gran piedra en el camino para ayuntamientos como el de Yecla que ya han mostrado su rechazo.