Los distintos llamamientos destinados a incrementar el fondo documental del Archivo de la Real e Ilustre Cofradía de la Santísima y Vera Cruz de Caravaca siguen dando sus frutos. En un corto periodo de tiempo, este fondo se ha incrementado con la incorporación de fotografías, programas y revistas festeras, así como documentos audiovisuales que los hermanos cofrades han ido aportando para su conservación en el archivo o bien para su digitalización. Durante los últimos meses se han entregado al archivo de Cofradía 103 fotografías de fiestas, aportadas por la familia de Manuel Sáinz de Vicuña y García-Prieto, hermano mayor durante los años de 1967 a 1972.

También se han entregado un total de 101 archivos audiovisuales de los actos más significativos de la Junta Representativa de la Real e Ilustre Cofradía de la Santísima y Vera Cruz de Caravaca y tres DVD-resumen de las Fiestas durante los años 2011 y 2014, aportadas por Diego García Blaya (Telecaravaca). En ellos se incluyen las últimas audiencias ante el papa en la Basílica de San Pedro en Roma. También se ha entregado el archivo fotográfico de todos los actos festeros y religiosos publicados en LA OPINIÓN durante el periodo comprendido entre 2009 y 2012, así como fotografías aportadas por exhermanos mayores y miembros de anteriores Juntas Representativas, entre ellos Paco Pim, Antonio Romera, Pedro Guerrero, Francisco Yago y Mariano Martínez-Iglesias.

Otros hermanos cofrades han colaborado con la aportación de material para su digitalización con objeto de poder completar la colección de revistas y programas festeros editados por la Comisión de Festejos desde sus inicios hasta la actualidad. Proyecto que en breve podrá ser concluido, gracias al trabajo de Mariano García-Esteller y Diego Marín, que han aportado los últimos programas y revistas de las que la institución religiosa tenía conocimiento de su existencia. Desde la institución religiosa han hecho un llamamiento a todos los caravaqueños y hermanos cofrades, indicándoles que en la Oficina de Cofradía se dispone de los medios necesarios para la digitalización de cualquier documento referente a la historia de la Santa Cruz de Caravaca y sus fiestas.

Uno de los handicap que siempre ha tenido la Cofradía ha sido la falta de material histórico, así como piezas de museo y ajuar de procesión. Recientemente adquiría una completa colección de Cruces de Caravaca procedente de la familia de Juan Sánchez Torrecilla, que ha recopilado a lo largo de toda su vida adquiriendo ejemplares por todos los rincones de España.

Es una colección de más de 80 piezas, de las cuales se han expuesto en el museo de la Basílica unas 70, abarcando desde final del siglo XVII hasta el siglo XX. En concreto, se trata de la representación de la Cruz de Caravaca en diversos soportes: metales como plata, latón o bronce, aunque también hay piezas en cerámica, papel y en diversos materiales.

Pero sin duda alguna, la pieza cargada de más contenido histórico y sentimental fue la que llegó a Caravaca en marzo de 2006, una astilla del Lignum Crucis que los Franciscanos custodian en Jerusalén. La astilla del madero de Cristo llegó a la Ciudad Santa del Noroeste murciano en un portareliquias elaborado con madera de un árbol del Huerto de los Olivos y con catorce piedras que representan cada una de las ermitas de la Vía Mariae.