Un despliegue de más de 20 personas, entre miembros de los grupos de espeleología de Cieza, bomberos y Guardia Civil, permitió localizar y rescatar sanos y salvos en la madrugada del pasado lunes a dos chicos, primos hermanos de 14 y 16 años de edad, que habían quedado atrapados en una zona de muy difícil acceso del monte de la Atalaya, muy cerca del pico de la emblemática montaña ciezana.

Según comentaron los propios menores tras ser descumbrados, hubo un momento que ni podían ascender más ni retornar por lo escalado, por lo que uno de ellos avisó al 112 alrededor de las 19.35 horas del domingo.

En primera instancia acudieron en su rescate efectivos del Consorcio de Extinción de Incendios y Salvamento de la Región de Murcia con base en Cieza, aunque pronto precisaron de la ayuda de voluntarios expertos en escalada de los grupos GREM y Cieza Vertical, ambos del municipio, así como excursionistas del Grupo de Senderismo El Almorchón, quienes, con la ayuda de más bomberos especialistas llegados desde Murcia y de agentes de la Guardia Civil, pudieron acceder a los dos jóvenes.

El primero de ellos fue descendido alrededor de las 2.50 horas, mientras que el segundo se retrasó hasta pasadas las 3.30 de la madrugada. Ambos fueron reconocidos por facultativos de una Unidad Médica Especializada que se desplazó hasta el lugar. Uno de los niños se fue directamente a su casa y el otro fue trasladado al Hospital al aducir que le dolía una pierna y el pecho, aunque los médicos de guardia constataron que no había lesión alguna.

Al lugar acudió asimismo el alcalde de Cieza, Antonio Tamayo, y los ediles Fernando Tamayo y Matías Ríos, permaneciendo en la zona hasta el final de la difícil operación de rescate.

Horas de angustia

Conforme iban pasando las horas y avanzando la madrugada, la angustia se iba adueñando de los familiares de los dos menores. El intenso frío, alrededor de 5 grados centígrados, agravaba la sensación de impotencia de los que aguardaban la labor de los profesionales y de los voluntarios.

Y es que la zona donde los dos chicos quedaron atrapados, conocida popularmente como Los Cuchillos o Las Agujas de la Atalaya, es realmente peligrosa. «Constituye un lugar protegido y a la vez desaconsejado para la práctica de la escalada", explicaba el regidor ciezano, Antonio Tamayo, mientras esperaba también el feliz desenlace.