La lluvia no logró amilanar a los alumnos, padres y madres del instituto Francisco Ros Giner de Lorca que ayer, y como estaba previsto, tomaron las calles de la ciudad para reclamar el inicio de los trabajos de reconstrucción del centro, paralizados desde hace meses y cuya primera piedra fue colocada el pasado marzo.

La manifestación partía con media hora de retraso debido a la intensa lluvia, que en un principio hizo temer por la desconvocatoria de la protesta. Lo hacía desde la calle María Agustina, donde se encuentra el solar del instituto derribado y donde, según el Ampa, la empresa concesionaria de los trabajos ha comenzado a retirar la maquinaria para la reedificación, presupuestada en 3,1 millones de euros, después de varios meses de paralización.

Los alumnos de este instituto llevan desplazados de su centro habitual desde su derribo en 2011 y desde entonces comparten espacio con alumnos de otros institutos en horarios distintos.

El AMPA del centro recuerda al respecto que el proyecto de reconstrucción del instituto se presentó en mayo de 2012, «con la firme promesa del comienzo de las obras en diciembre de ese mismo año». No ocurrió así, y la colocación de la primera piedra se postergó hasta el 14 de marzo de 2013 «pero a esa no le siguió ninguna otra». Más tarde, recuerdan, «volvimos a asistir a otra presentación pública del proyecto reformado del instituto en octubre de 2013, con la promesa firme y rotunda de la consejería de Educación de que se iniciarían las obras», algo que nunca llegó.

A esta protesta se sumarán otras, como que los estudiantes no acudirán a clase hasta el 13 de enero o una concentración en la puerta de la consejería el 9 del mismo mes.