El perro es el mejor amigo del hombre y también podría ser el más útil. Quien lo sabe muy bien es Antonio Sandoval, un ciezano que desde hace varios años viene dedicándose al adiestramiento de canes. Tutela desde hace unos meses el Centro de Intervención de Perros Operativos (CIPO), una asociación encaminada a ofertar cursos para aprender a educar a nuestra mascota. Su centro de adiestramiento se encuentra en el Paraje de Los Albares.

Pero la idea va mucho más allá. En algunos países, los perros se utilizan ya hasta para detectar el cáncer en personas. Y es que la vida de estos animales gira siempre en torno al olfato, un sentido con el que saben encontrar, diferenciar y hasta identificar. En principio, el cáncer de próstata sería uno de los más fáciles de localizar por un can a través del olor de la orina de un determinado paciente, aunque los experimentos realizados arrojan también resultados positivos en otras afecciones oncológicas como las de pulmón a través de los olores del aliento de las personas.

El propósito, aún en periodo de gestación, sería la posible puesta en marcha de una unidad canina en el Hospital de Cieza para ayudar con el diagnostico de enfermedades de este tipo. El municipio se convertiría de esta manera en pionero en la Región e incluso en el país en este servicio. Sandoval ya ha mantenido las primeras conversaciones oficiales, aunque la magnitud del proyecto requiere un groso estudio en el que ya trabaja. Las ventajas podrían ser múltiples. Para empezar, el paciente se ahorraría la agresividad de determinadas pruebas, por no hablar del coste que éstas conllevan a las arcas de la Seguridad Social.

Otra importante tarea que cada vez está más extendida es la utilización de los perros para detectar la existencia de estupefacientes. El grupo que dirige Sandoval trabaja igualmente en este apartado y se ha ofrecido a estamentos oficiales como policías locales y otros cuerpos de seguridad para tal fin.

Detección del picudo rojo

Los canes pueden localizar igualmente enfermedades en las plantas. En las ciudades de Elche, Orihuela y Murcia, por ejemplo, se utilizan con éxito para la detección del picudo rojo, la larva que está exterminando al famoso palmeral ilicitano y que ya comienza a extenderse a otras regiones españolas. Por otra parte, y como es sabido, Cieza conserva las mejores y más grandes olmedas de España. Al respecto, otra plaga igual de dañina está acabando con los olmos en todo el país. La grafiosis, que así se llama la enfermedad, podría ser detectada también por perros si se les educa.

Sandoval insiste en que las posibilidades para enseñar a nuestro animal de compañía «son amplísimas», desde el adiestramiento para personas invidentes hasta perros especializados en impedir la violencia de género.

«Aunque llevamos muchos años entrenando a nuestros perros, nos hemos querido embarcar con la creación de este centro para que la gente se conciencie de lo mucho que nuestra mascota nos puede ayudar», explica Sandoval, que además anuncia el importante acuerdo al que ha llegado con Can Padro, el mayor Campo de Entrenamiento de Europa con 700.000 metros cuadrados de instalaciones situadas en plena sierra de Montserrat, en Barcelona. El adiestrador informa además de la exhibición a gran escala que precisamente en este emplazamiento catalán se va a celebrar en octubre.