El proyecto piloto para la recuperación de la bahía unionense de Portmán, punto negro de contaminación por metales pesados en el Mediterráneo, supone un ejemplo innovador de regeneración de un espacio costero agredido durante décadas por la actividad minera. Las responsables de este proyecto, las doctoras en Ciencias Químicas María José Martínez Sánchez y Carmen Pérez Sirvent, ambas del Grupo de Investigación de Contaminación en Suelos de la Universidad de Murcia, han impartido la conferencia 'Contaminación minera en zonas costeras: el caso de la bahía de Portmán' en la sede de Casa Mediterráneo, en Alicante.

La bahía de Portmán ha sufrido durante más de 2.500 años los efectos de la minería y en la actualidad se encuentra totalmente anegada por más de 63 millones de toneladas de estériles mineros de la minería de pirita, blenda y galena. En declaraciones a Efe, Martínez Sánchez y Pérez Sirvent han explicado que el proyecto de recuperación de esa bahía se basa en una tecnología ideada por la Universidad de Murcia "barata y fácil de aplicar", que plantea una solución "consensuada" con todas las administraciones implicadas (estatal, autonómica y municipal) y los vecinos.

En muchos aspectos, esta iniciativa es modelo de regeneración en el Mediterráneo, porque la tecnología que se emplea en ella puede aplicarse en cualquier zona de sierra o próxima al mar, señalan.

La tecnología es barata porque todo se basa en la fabricación de un suelo artificial sobre el sedimento contaminado, y la experiencia de los trabajos que se realizan en dicha bahía puede servir para "numerosas investigaciones e investigadores de otras tecnologías, no sólo de descontaminación de suelos, sino también geoquímicos, geofísicos...", según Martínez Sánchez y Pérez Sirvent.

"Este proyecto es y ha sido un reto para la Universidad de Murcia. En él copiamos lo que hace la naturaleza: mezclamos artificialmente carbonato cálcico con los contaminantes existentes", lo que permite eliminar la peligrosidad de éstos porque no se movilizan, han manifestado. Luego se combinan con diferentes capas para que no haya transferencia de contaminantes al medio, porque la tecnología de este proyecto piloto se basa en que no se muevan los residuos o se muevan lo menos posible.

Hasta la fecha, hay 24 hectáreas de la bahía tratadas en este proyecto piloto, iniciado en 2006.

Hay que recordar, sin embargo, que se ha puesto sobre la mesa otro proyecto, que cuenta con el beneplácito de las distintas administraciones, que plantea, precisamente, la retirada de los estériles mineros de Portmán. Es decir, justo lo contrario de lo que desarrolla el proyecto de la UMU.