El Bando de los Caballos del Vino de la ciudad de Caravaca realizó ayer su tradicional misa ofrenda a la patrona de la Ciudad y el traslado de Santa Elena. La jornada comenzó en la Iglesia Mayor de El Salvador, donde se inició el traslado procesional hasta la popular ermita de Santa Elena, situada en el barrio del Hoyo, cuna de la tradición de los Caballos del Vino de la ciudad. Allí tuvo lugar la bendición de banderines de las sesenta peñas que conforman el Bando de los Caballos del Vino.

Una vez que el cortejo llegó a la Basílica se produjo la misa ofrenda por parte de todas las peñas a la santísima Cruz, la ceremonia fue presidida por el capellán del Santuario Pedro Ballester, que recordó en su homilía la importancia que tiene en Bando de los caballos del Vino en la ciudad y el rito de la bendición de las flores y el vino. La ceremonia estuvo presidida por las Amazonas del Bando, Ainhoa Pedraza y Nerea Hidalgo, así como el presidente, Antonio Caballero, y el Caballista del Año, Emilio Ferrer. Junto al alcalde de Caravaca, Domingo Aranda, y al Hermano Mayor de la ReaI cofradía, Pedro Pozo.

Finalizada la eucaristía se realizó el tradicional sorteo de números que llevarán los caballos en la mañana del día 2 de mayo, y que establece el orden para correr la cuesta. La carrera de los caballos del vino es uno de los momentos más intensos, dentro de las fiestas en honor a la Santísima y Vera Cruz, donde el caballo cogido de cuatro corredores debe de subir los ochenta metros de la última cuesta de acceso a la basílica en el menor tiempo posible.

Este año, el primer caballo en realizar dicha ascensión será la Peña Azahara, y el campeón de la Carrera 2012, la peña Ambicioso subirá en el puesto número treinta.