Moratalla se convertía esta Semana Santa en el centro de las redes sociales tras el comentario que realizaba hace unos días una agente de la policía local de esta villa en su cuenta de twitter, que decía así: "Vendo el kilo de tonto Moratalla a 1 euro". El comentario, que se realizó en la cuenta personal de la agente y que fue eliminado rápidamente, corrió como la pólvora por las redes y trascendió el universo digital hasta el punto de que ayer la agente, vecina de Calasparra y que trabaja en Moratalla y que tenía turno de mañana, se encontró que por las cafeterías de la población habían repartido pegatinas, en las que se podía leer "+ de 50 kilos de orgullos@s morataller@s esperando a una tonta de Calasparra".
El comentario era ayer 'trending topic' en la gran mayoría de bares y tiendas de este municipio del Noroeste, pese a que la propia agente publicó horas después en su propio perfil de Twitter una disculpa por el mensaje. Aunque los comentarios de apoyo a la agente no se han hecho esperar, por el momento tiene bloqueada su cuenta y únicamente pueden ver sus comentarios las personas autorizadas por ella.
Por su parte, el portavoz del Grupo Municipal Socialista, Miguel Martínez, solicitaba al Ayuntamiento información sobre estas manifestaciones que considera "ofensivas e impropias de una funcionaria pública", y asimismo ha pedido información sobre si la policía tuitera se encontraba de servicio en el momento de publicar el comentario, si el Equipo de Gobierno tiene previsto tomar algún tipo de medida y, por último, una copia del expediente disciplinario que, según este partido, se le abrió a la misma agente en el año 2011 por otras causas.
Al respecto, fuentes cercanas al ayuntamiento de Moratalla han informado a este diario que el alcalde Antonio García mantuvo ayer un encuentro con miembros de la Policía Local, en el que pidió disculpas con el desafortunado comentario. Asimismo aclaraban que el expediente no fue abierto únicamente a dicha agente, sino que fue un expediente que se incoó a once agentes que sufrieron "una extraña enfermedad colectiva".
Por último aclararon que el equipo de gobierno estudiará el caso, pero que se está haciendo "una quema de brujas por un desafortunado comentario".
