Cuando se han cumplido 18 meses de los terremotos que sacudieron la ciudad de Lorca, cerca de 8000 personas siguen aún fuera de sus hogares y unas 1500 viviendas continúan sin reconstruir, según el presidente de la Asamblea de Vecinos Afectados por los Terremotos, Juan Carlos Segura.

Más de 300 personas participaron ayer en una concentración con cacerolada, para pedir a las administraciones local, autonómica y central que agilicen los procesos que hay en marcha para volver cuanto antes a la normalidad.

Pese al mal tiempo reinante, los vecinos se congregaron con pancartas, cacerolas y pitos en la Plaza de Calderón, frente al teatro Guerra, en una concentración presidida por una gran pancarta en la que se podía leer: ´18 meses de mentiras y abandono´, junto a otras con textos como ´Lorca en pie, solidaria, unida y participativa´, ´Ni un solo damnificado sin soluciones inmediatas´, o ´Lorca agoniza, soluciones ya´, aunque el mayor número de pancartas hacía referencia a la reconstrucción que según los convocantes, «está paralizada con solo cinco o seis grúas trabajando».

La cacerolada, a la que asistieron varios concejales del PSOE e Izquierda Unida, comenzó guardando un minuto de silencio en recuerdo de las víctimas, tanto de los terremotos de 2011 como las de las inundaciones del pasado mes de septiembre. A continuación, Segura dio lectura a un manifiesto recordando punto por punto cada una de las reivindicaciones aún pendientes de ejecutar, pese a las promesas efectuadas por los representantes de las distintas administraciones.

Durante el mismo se recordó la cacerolada que la asociación de vecinos de Patraix, barrio de Valencia, estaba realizando en ese mismo momento en solidaridad con los damnificados de Lorca.

Plan de reactivación económica

Los afectados reivindican la situación en la que se encuentran los edificios en estado de indefinición que transcurrido tanto tiempo aún no se ha resuelto su futuro. Piden asimismo que se ponga en marcha un plan de reactivación económica que posibilite la recuperación comercial y reduzca las alarmantes tasas de paro que existen. Igualmente, criticaron que el denominado Plan Lorca no siga los cauces que se dieron a conocer en agosto de 2011 y que se haya retrasado su periodo de ejecución.

Según Juan Carlos Segura, «hay 8.000 personas fuera de sus viviendas y 1.500 casas por reconstruir», a la vez que recordó que tampoco se han llevado a cabo las reconstrucciones previstas en centros educativos y sanitarios como es el caso de los institutos Ros Giner y Ramón Arcas Meca, así como el centro de salud Lorca Centro. No obstante reconoció que «hay atisbos de que van a empezar a hacer algo» en referencia al anuncio de la consejería de Educación de adjudicar en breves días las obras de reconstrucción de los institutos.

Los afectados califican de «sangrante» que un año y medio después de la catástrofe «sigan habiendo miles de desplazados y las perspectivas de volver a ocupar sus casas se conviertan en una odisea».