­La Asociación de Vecinos de la pedanía muleña de Casas Nuevas reclamará a la dirección general de Medio Ambiente que se revise la normativa regional sobre al uso de lodos de depuradoras en las explotaciones agrícolas, actualmente sin especificar, y que se cree una norma que evite el uso de estos desechos durante el periodo comprendido de mayo a septiembre en las cercanías de los núcleos urbanos, además de que se regule su uso en estado seco -que no genera olor -y que se guarde distancia respecto a ramblas, pozos o acuíferos.

Todas estas medidas, afirman, evitarían daños en el medio natural, la proliferación de insectos y los malos olores que han sufrido los vecinos de esta pedanías en los últimos meses debido al uso de estos fangos en fincas que se encontraban a escasos kilómetros el núcleo de viviendas y que ha ocasionado que tengan que convivir con las moscas, dañando «el bienestar» de vecinos y visitantes y «afectando a la imagen turística de la zona», bajo la proyección de Sierra Espuña.

Los vecinos afirman que el hecho de revisar estas medidas no dañaría el desarrollo de la agricultura, principal forma de vida de los vecinos de Casas Nuevas, ya que la petición de que los lodos no se depositen en verano no perjudica al campo, ya que no es imprescindible su abono en estas fechas para que sea más productivo.

Con las últimas lluvias torrenciales, gran parte de los lodos que se encontraban en proceso de secado en una de las fincas de la zona fueron desplazados por la escorrentía de agua hasta el barranco de Carlos Calvillo que va directamente al núcleo urbano y que, posteriormente, desemboca en la rambla de Malvariche.

Los vecinos quieren saber, además, si existe realmente un control de los vertidos que se depositan, si cumplen con los correspondientes estudios de metales pesados -ya que no todos los suelos necesitan la misma cantidad de compostaje-, y si existe un riguroso control y normativa de su uso y transporte, ya que hay un gran desconocimiento de cómo afectarán en años venideros a las explotaciones agrarias.

A raíz de hacerse públicas las molestias que generaban los lodos, dos de las tres empresas valencianas que distribuyen sus vertidos en Casas Nuevas se han puesto en contacto con los vecinos. Asimismo, destacan que en las últimas semanas han podido comprobar cómo los camiones cargados de lodos se dirigían hacia Totana.