La Base Aérea de Alcantarilla acogió ayer una jornada aeronáutica conmemorativa del centenario de la Aviación Española a la que asistieron varios miles de personas que no quisieron perderse las diversas actividades que había programadas para todas las edades, por lo que las familias que aprovecharon para pasar un sábado de manera diferente fueron muy numerosas.

Una de las grandes atracciones del día fue la presencia de la Asociación Codex Belix de representaciones históricas que, ataviados con prendas originales que llevaron los soldados alemanes durante la Segunda Guerra Mundial, recrearon un desfile de la Wehrmach transformando la Base Aérea en el Berlín triunfante tras la caída de Francia en 1940. Entre ellos desfilaba la 17 Infanterie Regiment, el grupo más antiguo de España, que tiene su sede en Murcia, desde donde colabora con el Canal Historia recreando grandes batallas.

Otro de los grandes focos de atención del día estuvo en el túnel de viento, donde los civiles pudieron disfrutar del simulador de caída libre, o del Simfac, simulador de apoyo aéreo, en el que se realizó una charla explicativa para todos los públicos. Además, los visitantes pudieron contemplar diversas exposiciones fotográficas y de material de la EMP y del EZAPAC.

Pero ayer fue el día del cielo: una exhibición de la PAPEA, una demostración paracaidista de la 721 SQN y de la EZAPAC, y la final del campeonato paracaidista Alfaro Arregui hicieron que los asistentes no pudieran nunca bajar la vista de las alturas.

Sin duda, los niños fueron los que más disfrutaron del día y de su primera experiencia a bordo de un Aviocar del Ejército del Aire, en el que llegaron a ocupar la cabina de los pilotos; eso sí, el aeroplano nunca separó sus ruedas del suelo. Y de la pista de despegue, a la pista americana, donde los soldados de la Base Aérea tuvieron que emplearse a fondo para seguir el paso los más pequeños.