El primer pleno de Antonio García al frente del Gobierno de Moratalla no trajo un futuro muy halagüeño para el municipio.

En el séptimo punto del día, el interventor municipal tomó la palabra para informar al pleno del estado real de las cuentas del Ayuntamiento. A fecha de 11 de junio, el Consistorio moratallero tiene una deuda total de 28.578.089,82 euros, déficit que según el regidor municipal «será imposible de superar solos, necesitamos el apoyo legislativo de todas las instituciones».

Según el desglose de la deuda, al cual ha tenido acceso LA OPINIÓN, el Ayuntamiento debe 510.153,09 euros en salarios a sus trabajadores, correspondientes a los meses de abril y mayo, además del pago del mes de febrero de las asignaciones de los concejales y pedáneos. A este importe habrá que sumar en solo dos días la nomina del mes de junio y la paga extraordinaria de verano.

En el capítulo de deuda con los proveedores, aparece un déficit de 8.728.305,37 euros, de los cuales un 8,45% corresponden a intereses de demora (738.242,98 euros), correspondientes a las facturas de proveedores conforme a lo establecido en la Ley de Contratos del Sector Público y la Ley 15/2010 de medidas contra la morosidad.

La deuda con otras administraciones asciende a 4.005.580,59 euros, de los cuales 2.684.754,16 son impagos a la Seguridad Social; 380.241,08 a la Agencia Tributaria; y el resto a las administraciones regional y central por la concesión de subvenciones para proyectos que no se han realizado.

Pese a que la Seguridad Social aprobó un expediente de aplazamiento de la deuda a diez años en enero de 2010, el Consistorio mantiene un descubierto en sus cuentas bancarias de 251.253,11 euros. En este apartado bancario tiene contraída una deuda a corto plazo en cuatro pólizas de 1.244.558,30 euros. Una de ellas, contraída con CAM, esta vencida con fecha 31 de diciembre de 2010. Según el interventor, «no se ha podido renovar porque se deben recibos de préstamos». Esto supone un interés de demora del 29%, que ha generado 58.650,31 euros más de deuda. Además, será prácticamente imposible evitar el vencimiento de dos pólizas firmadas con Cajamar (30 de junio de 2011) y Cajamurcia (22 de julio de 2011), debido a otras deudas con las entidades y a que el ayuntamiento ha superado su ratio de endeudamiento.

A largo plazo

En préstamos a largo plazo hay una deuda de 3.771.261,55 euros por la firma de 12 préstamos con Cajamurcia (4), BBVA (2), CAM (4), BSCH (1) y Cajamar (1).

También existe un total de 560.287,65 euros correspondientes a reintegros de subvenciones que, por falta de ejecución o justificación, se han iniciado pero todavía no se han resuelto definitivamente. Entre ellos están los proyectos de la hospedería de Béjar, el itinerario Benízar-Cámping La Puerta y el puente del Comendador. Otra partida de 4.555.505,05 euros corresponde a ingresos de préstamos o subvenciones que están destinados a gastos e inversiones concretos, pero todavía no se han realizado.

Por último, el informe menciona la deuda actual de la entidad pública Promoratalla, que asciende a 4.951.185,11 euros, entre un préstamo hipotecario de 3 millones, deuda generada con la constructora La Generala (1.351.185,11 euros) y un préstamo del ministerio de Industria (600.000 euros).

4.500 euros por habitante

El Consistorio moratallero, con una población de 8.444 habitantes, atraviesa de esta forma la peor crisis de su historia, ya que acumula una deuda de casi 4.500 euros por habitante.

El primer edil, Antonio García, afirmó al respecto que «todos los vecinos podrán pasar por el Ayuntamiento para conocer el estado actual de las cuentas». Asimismo, informó de que en el próximo pleno, el PP llevará una propuesta de auditoría de la última legislatura.

El nuevo alcalde ya ha iniciado conversaciones con la Comunidad, y adelantó que se reunirá la próxima semana con el presidente del Ejecutivo regional, Ramón Luis Valcárcel, la consejería de Economía, la Agencia Tributaria y con distintas entidades financieras.

El portavoz de IU-Verdes calificó la situación actual de «bancarrota», y exclamó que «no me explico cómo no se ha dado la alarma antes», valorando la posibilidad de que un técnico declare el Ayuntamiento en ruina económica.

Por su parte, Juan Llorente, ex alcalde de la ciudad, puntualizó que faltaban por contabilizar ingresos pendientes de 5 millones de euros, e informó de que existe un pago pendiente de la Comunidad Autónoma. «Durante la última legislatura no ha habido ingresos de ningún tipo por la crisis», indicó.

El interventor matizó que de los ingresos pendientes, casi el 40% es de dudoso cobro y deuda prescrita. Antonio García concluyó el pleno con una exclamación: «¡Que Dios nos ampare!»