El campamento de La Torrecilla ha recibido a 350 personas más de las 1.048 que hay censadas desde el miércoles por la noche y que aún no disponen de casa tras el terremoto del pasado miércoles 11. Casi todos ellos son inmigrantes de Marruecos, Ecuador y Bolivia, además de subsaharianos y de Europa del Este.

El campamento está en unas instalaciones deportivas municipales situadas en las afueras de Lorca. Hay tiendas de campaña montadas por la Unidad Militar de Emergencia en un campo de fútbol de tierra, que será cubierto con moquetas para evitar el polvo, y otras colocadas en pistas de tenis y de padel.

Además, se han instalado duchas, lavabos, un dispensario médico y varias carpas más con representantes consulares de Ecuador, de la Cruz Roja, del 112 y de otros servicios de emergencia.

Ayer todavía estaban llegando afectados por el terremoto, que tras ser identificados, reciben una tarjeta con la que pueden pasar por los dos

controles instalados para acceder a las tiendas de campaña, en cuyo interior hay literas.

En un puesto de la Cruz Roja hay almacenadas bolsas con bocadillos, refrescos, barras energéticas y frutas, que se entregan a las horas del desayuno, la comida y la cena, según el consejero de Justicia, Manuel Campos, que calificó como «dignas» y «aceptables» las condiciones de vida de la nueva instalación, en cuyo montaje, control y abastecimiento trabajan dos mil personas.

Además, un total de 120 familias afectadas por los terremotos ya han sido atendidas por Cáritas Lorca en su punto de información para recoger peticiones de ayuda con el fin de agilizar la atención y la acogida de los damnificados.

Además, Cáritas continúa colaborando con los servicios de emergencias en la realización del censo de población afectada y en las tareas de distribución y elaboración de comidas para el millar de personas que se encuentran aún en el campamento habilitado para los damnificados.

Asimismo, ha restablecido la distribución de alimentos en el Barrio de los Ángeles a 550 familias que ya atendía Cáritas antes del seísmo, para lo que han recogido alimentos en conserva.

En cualquier caso, la organización de la Iglesia ha explicado que aún no se ha podido restablecer toda la actividad de los proyectos que Cáritas tiene en Lorca, ya que los edificios y las sedes han quedado «completamente derruidos o están apuntalados».