La Audiencia Provincial de Murcia ha reabierto un caso por presuntas injurias vertidas en un periódico digital que fue sobreseído por el Juzgado de Instrucción número 2 de Molina de Segura, al que ha obligado a tomar declaración como testigos a los propietarios de este medio.

La Sala estima «por motivos formales» el recurso presentado por un hombre contra la decisión de archivar la causa y con el que éste alegó que el juez había acordado el sobreseimiento del caso sin haber practicado las diligencias solicitadas ni haberse pronunciado sobre las mismas.

En su solicitud, el demandante proponía una prueba testifical para tratar de identificar al autor de las presuntas injurias, que fueron vertidas a través de un seudónimo.

Al estimar el recurso presentado por el denunciante, la Sala afirma que «el Juzgado de instancia no ha explicado las razones, primero, del sobreseimiento y, luego, de la desestimación del recurso de reforma y tampoco ha explicado la hipotética innecesariedad de la diligencia interesada».

Añade la Sala que, «por ello, es evidente que la única salida procesal adecuada es que se practique la misma, así como sus derivadas, si fueren precisas».

El tribunal revoca los autos del Juzgado, al que ordena a tomar declaración a los dueños del periódico digital donde se publicaron las presuntas

injurias.