El ayuntamiento de San Javier vivió ayer un nuevo capítulo de la legislatura más complicada que ha tenido el municipio en su historia democrática, en la que ningún partido (9 ediles el PP, 7 el PSOE, 4 el CISJ y uno el CDL) tiene mayoría suficiente para hacer las cosas por sí solo.
La portavoz del Grupo Municipal Independiente, Arantxa Espeso, retiró a última hora una moción que tenía previsto presentar en el pleno de ayer con la que pretendía obtener la dedicación exclusiva para, al menos, un concejal de los dos grupos políticos que forman la oposición municipal -su propia formación y el Partido Popular-. El objetivo es que los ediles liberados tengan más tiempo para desarrollar su labor, percibiendo un sueldo del Consistorio.
La solicitud no tiene nada del otro mundo teniendo en cuenta de que hoy en día en la mayoría de ayuntamientos democráticos de cierta envergadura hay concejales de la oposición liberados con retribución municipal. Sin embargo, lo que indignó al equipo de Gobierno del PSOE en San Javier es que el grupo de Espeso, junto al PP, aprobó una moción en un pleno celebrado a principios de año en el que se rebajó en un 10% el salario a la alcaldesa, la socialista Pepa García, y a los concejales de la corporación. La necesidad de reducir gastos en una época de crisis económica mundial fue el argumento que la oposición utilizó para justificar su actuación. García tuvo que cumplir la orden del pleno, al gobernar en minoría (8 ediles frente a 11 de CISJ y PP).
Los socialistas ven contradictoria e hipócrita la pretensión de su antigua socia independiente de solicitar ahora la liberación de concejales de la oposición. Además, su minoría en el pleno les hacía temer que los populares apoyaran la propuesta independiente, ante lo cual el PSOE no podía haber hecho otra cosa con la moción que 'comérsela con patatas'.
Pero finalmente, y para sorpresa de los socialistas, el Grupo Independiente no llevó su solicitud al pleno. Arantxa Espeso señaló que la actitud contraria del PSOE en la junta de portavoces previa al pleno le hizo desistir de su intención inicial y dejar la propuesta para una próxima sesión, "para aportar así informes jurídicos que le ofrezcan una justificación más sólida e intentar así que sea aprobada".
El partido político de Arantxa Espeso fue el azote del ex alcalde José Hernández en el anterior mandato. Inició esta legislatura gobernando con el PSOE, pero el acuerdo se rompió. Negoció con el PP una moción de censura que no llegó a buen puerto.
