Fue la madre de la menor de 15 años, aconsejada por una fundación experta en apoyo psicológico a menores, la que denunció a los tres jugadores de la Arandina de 19, 22 y 24 años por, presuntamente, agredir sexualmente a la chica. La policía detuvo a los jóvenes e inspeccionaron el piso que comparten, donde se cometió el supuesto delito. Tras 4 horas de resgistro los jugadores salían ocultando sus rostros y la policía científica cargada de pruebas recogidas en la vivienda. Hoy hemos visto salir de los juzgados a la víctima, en un coche, en el asiento trasero tapándose la cara. Según ha declarado la invitaron a su piso, se negó a mantener relaciones sexuales y la forzaron. Después declaraban los tres detenidos. La juez los ha enviado a prisión provisional sin fianza acusados de un delito de agresión sexual.