La ISAF señaló en un comunicado que el militar falleció en un ataque que posteriormente fue repelido por tierra por sus compañeros, sin de que de momento se sepa el número de bajas entre los insurgentes.

La Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad nunca divulga la nacionalidad de los soldados fallecidos, si bien Helmand, una de las provincias más peligrosas de Afganistán, es la principal base de los militares británicos desplazados a Afganistán.

En otro incidente separado, ocurrido en la conflictiva provincia de Kandahar (sur de Afganistán), otro soldado de la OTAN y seis militares afganos resultaron heridos hoy en un ataque con mortero contra su base.

Ayer también se informó de la muerte de dos soldados franceses pertenecientes a las fuerzas especiales en un ataque con una mina activada a distancia en la provincia de Laghman (este de Afganistán), seguido de una emboscada de supuestos talibanes.

Este año ha sido uno de los más violentos en Afganistán desde el derrocamiento del régimen ultraintegrista talibán, en noviembre de 2001, pues han muerto en distintos incidentes cerca de 2.000 personas, entre ellos casi cien soldados extranjeros.