La tercera generación del excelente modelo japonés es claramente más ambiciosa, habida cuenta del difícil y poblado segmento en el que se encuentra. Descatalogó hace unos meses al Swift de 2010, apareciendo con una única carrocería de 3,84 metros de longitud y cinco puertas que, por puesta a punto, no hace ascos a un viaje largo ni renuncia a una buena practicidad interior.

Motores

La gama mecánica comprende un 1,2 l. de 90 CV y un 1,0 l. Turbo de 111 CV, además de la versión Sport de 140 CV que tratamos aparte. El primero de ellos tiene cuatro cilindros y tiene disponible un cambio manual de cinco relaciones o uno automático de variador continuo. También se puede combinar con la tracción total, algo pocas veces visto en ese segmento. El segundo da más poder, se configura con tres cilindros y turbocompresor, y se vende solo con tracción al eje delantero y cambio manual de cinco velocidades. Aunque eso no es todo, porque ambos propulsores pueden sumar un pequeño motor eléctrico que ayuda en fases de aceleración y arrancadas, creando un conjunto híbrido (versiones SHVS). Nosotros precisamente hemos podido probar un Swift dotado de esta opción mixta, con el motor más potente de 111 CV.

Funcionamiento

En marcha, el mencionado propulsor eléctrico ayuda al de gasolina cuando demandamos aceleración, así se controla el gasto de combustible. También lo pone en marcha en conducción por ciudad, haciendo las veces de generador de energía en fases de retención, una energía que se almacena en un acumulador aparte. El sistema es sencillo (la parte eléctrica no llega a impulsar directamente las ruedas, como en la mayoría de los híbridos), pero efectivo, porque si bien no mejora las prestaciones, consigue que el grupo propulsor sea más eficiente. Así, el consumo medio homologado es de 4,3 litros (4,6 litros la versión sin ayuda eléctrica) y en el mundo real, es posible rondar los 5,5 litros incluso circulando en ciudad. Y todo ello con la respuesta alegre que otorga su buena relación peso/potencia (este Swift pesa menos de una tonelada) y su agradable tacto al volante, que se rubrica con la caja de cambios manual de cinco marchas, de excelente accionamiento y acertadas relaciones.

Interior y dotación

Su bien aprovechado habitáculo es casi tan espacioso como el de un compacto, que es un segmento superior, y se completa con un maletero de 265 litros de capacidad. Además, las puertas traseras dejan bastante hueco para entrar o salir, una muestra más de la practicidad a la que hacíamos referencia. Otra cosa que llama la atención es la dotación de sus dos versiones GLE y GLX, contado el primero con elementos como llantas de 16 pulgadas, equipo de audio con pantalla táctil, asientos delanteros calefactables, cristales traseros tintados y testigos de presión de neumáticos, entre muchos otros; el nivel GLX añade otras llantas de 16 pulgadas, arranque sin llave, climatizador, sistema multimedia con navegación, control de velocidad adaptativo con limitador, pantalla a color en la instrumentación, ópticas de Led para todas las funciones, retrovisores exteriores eléctricos con intermitentes integrados, alerta de salida de carril, frenada asistida, detector de fatiga para el conductor, cambio automático entre luces de carretera y cruce y asistente de salida en pendientes. Conviene decir que las variantes con motor auxiliar eléctrico implican este último acabado GLX.

Los precios del nuevo Suzuki Swift con el motor descrito de 111 CV son de 14.870 euros para la versión GLE y de 17.370 euros para la GLX.