El monovolumen de más capacidad de Opel resulta práctico, amplio por dentro y también es dinámico, sobre todo si monta la mecánica que tenía la unidad que hemos probado esta semana.

Comenzando por la gama, el nuevo Zafira se puede adquirir desde el verano pasado con cinco o siete plazas y una oferta de motores completa y eficiente. Ésta consiste en tres variantes de gasóleo, dos procedentes de un bloque de 1,6 l. con 120 y 134 CV y otra 2,0 l. de 170 CV, y dos de gasolina de un bloque de 1,4 l. con 120 y 140 CV. De este último motor hay una versión que puede circular con gas licuado de petróleo (GLP). Nosotros hemos contado para la ocasión con una unidad dotada del propulsor diésel más potente de 170 CV, una mecánica que le hace correr mucho incluso con la familia dentro sin que tengamos que visitar el surtidor con frecuencia.

Principalmente, la actualización ha afectado a los paragolpes, grupos ópticos (que ahora pueden ser de Led para todas las funciones), así como el sistema multimedia, que cuenta con más posibilidades de conexión.

Dentro, el ámbito que más importa de un vehículo como éste, el Zafira hace valer sus 4,66 metros de longitud para que sus ocupantes se sientan como en casa. Delante el espacio es el de una buena berlina, con la ventaja de la posición más alta que facilita la visibilidad; y detrás hay anchura suficiente para tres adultos (es uno de los mejores en este aspecto de su categoría). Con la configuración de cinco plazas, el maletero es enorme, 710 litros, y con siete el hueco se reduce a 152 litros. Hay que decir que en los asientos de la tercera fila puede viajar hasta un adulto, gracias a las cotas que hay en esa parte del coche. Algunos ejemplos prácticos que hemos encontrado en el interior son la cantidad de huecos para dejar todo tipo de enseres, la consola central con cajones móviles, muy útil, o las plazas centrales que se desplazan unos 20 centímetros para dar prioridad a la carga o bien permitir más comodidad a los ocupantes.

En marcha no da la impresión de ser un monovolumen grande. Eso es debido en parte a un chasis muy afinado que contiene los movimientos de la carrocería y también por la ágil respuesta del motor, que incluso da la sensación de tener más potencia de los 170 CV anunciados.

Funciona con bastante suavidad y resulta elástico en casi toda la gama de revoluciones, respondiendo con brío también a altas vueltas. Tanto o más que sus reacciones nos ha llamado la atención lo poco que gasta. Es fácil acercarnos a la cifra de homologación (4,9 litros) a poco que vigilemos el pedal derecho. La caja de cambios asociada de serie es manual de seis velocidades, y en opción hay una automática del mismo número de marchas. Nosotros lo hemos probado con la primera opción, y nos ha gustado su buen tacto y precisión.

Hay tres líneas de dotación para el Opel Zafira: Expression, Selective y Excellence. Para nuestro motor diésel de 170 CV está disponible el acabado más alto Excellence, que implica un listado de elementos realmente completo. Así encontramos el sistema de conectividad Opel OnStar que hace de servidor WiFi para siete dispositivos (además de un servicio de llamada de emergencia automática en caso de accidente, asistencia personal las 24 horas y varias funcionalidades más), pantalla táctil de 7 pulgadas para el equipo multimedia, llantas de 17 pulgadas, suspensión deportiva, siete plazas, raíles en el techo, luces de día con Led, sensores de aparcamiento delanteros y traseros y climatizador doble, entre muchos otros. Nuestra unidad se completaba además con varios elementos destinados a la seguridad, como reconocimiento de señales de tráfico, luces adaptativas de Led con sensor de oscuridad, control de velocidad con radar, sistema para transporte de dos bicicletas FlexFix (que se oculta en el paragolpes trasero), alerta por salida de carril involuntaria o aviso por colisión frontal.

El Opel Zafira ha ganado vigencia con los detalles actualizados. Si se elige con la mecánica diésel más potente, el resultado es una agilidad inesperada en un vehículo de este corte y con más de 1.700 kg de peso. Además, otra alegría es su bajo consumo para las prestaciones que da. Con el cambio manual, el Zafira 2.0 CDTi de 170 CV cuesta desde 31.500 euros; con el cambio automático vale desde 33.100 euros.