La marca de la parrilla ha renovado hace muy poco su todoterreno estrella, el Grand Cherokee, con una carta de equipamiento más completa y retoques de aspecto. Así, el 4x4 más grande de Jeep luce nuevos paragolpes con cambios en los faros antinieblas y la parrilla. Dentro hay pequeños detalles y más posibilidades de dotación. Las versiones principales se mantienen (Laredo, Limited, Overland, Summit y SRT), pero se añade una específica para conducción por tierra llamada Trailhawk, un acabado que está presente en otros modelos de la firma.

Los Grand Cherokee Trailhawk montan llantas de 18 pulgadas con neumáticos reforzados para la conducción todoterreno, y además se diferencian con varios elementos de aspecto dentro y fuera de la carrocería. Por otro lado, los Summit también se distinguen con nuevas llantas de 20 pulgadas, incorporan antinieblas de Led, dentro su tapicería es de cuero con napa en el salpicadero, su equipo de audio es más potente y el habitáculo está mejor aislado. En el resto de versiones también hay pequeños detalles más modernos.

La gama mecánica la componen dos motores diésel, ambos de 3,0 l y seis cilindros con 190 y 250 CV, y tres de gasolina, uno de 3,6 l. V6 de 286 CV, otro de 5,7 l. V8 de 352 CV y un 6,4 l. V8 de 468 CV. Todos son automáticos de ocho relaciones con tracción total y la reductora va de serie excepto en la versión más deportiva SRT.

Su longitud de 4,83 metros deja paso a un interior muy amplio en todas las plazas, con un maletero de 457 litros y mucha calidad en los materiales. En el salpicadero hay una pantalla de 8,4 pulgadas que forma parte del sistema multimedia Uconnect que puede contar con navegación. Hay varios sistemas de seguridad, como la alerta de salida de carril involuntaria, el avisador de choque frontal y la detección de objetos en los ángulos muertos, entre muchos otros elementos.

El precio de partida corresponde a la versión Laredo V6 de 190 CV diésel, que cuesta desde 58.250 euros.