El bonito compacto Q30 ya tiene su hermano de estilo ´crossover´. El nuevo Infiniti QX30 no sólo va más alejado del suelo, sino que también cambia sus paragolpes para aumentar su apariencia campera e incorpora la interesante tracción total.

La gama se articula sobre un único motor, el diésel 2.2d con 170 CV, un propulsor muy suave que destaca, además de por sus prestaciones (215 km/h de punta y 8,5 segundos de 0 a 100 km/h), por un consumo muy ajustado de 4,9 l./100 km. La caja de cambios escogida para la ocasión es una automática de siete relaciones de doble embrague. No hay por tanto una opción manual. La tracción total inteligente va de serie, con lo que su planteamiento de ´SUV´ compacto va más allá de una mera apariencia ligada a la moda.

Dentro presenta toda la calidad de los modelos de la firma y unos ajustes de vehículo ´premium´. El hueco para los ocupantes es bueno y el maletero no está nada mal por sus 430 litros (tiene un práctico doble fondo para compartimentar la carga). Delante, en el salpicadero, está la pantalla táctil del sistema multimedia de 7 pulgadas, que se gobierna mediante un cómodo mando entre los asientos delanteros.

Se han previsto dos niveles de acabado para el nuevo Infiniti QX30: Premium y Premium Tech. El primero de ellos incluye las llantas de 18 pulgadas, el sistema de reconocimiento de señales de tráfico, el equipo multimedia con la pantalla de 7 pulgadas, el avisador por cambio involuntario de carril, la alarma o el sistema de cancelación de ruido del motor que usa los altavoces, entre otros. El nivel más completo suma a lo anterior las ópticas de Led con cambio automático de luces de carretera y cruce, tapicería de piel con regulaciones eléctricas en las plazas delanteras, el acceso y arranque sin llave y la cámara trasera.

Ya está a la venta con un precio de partida de 39.990 euros, aunque la marca ha previsto una promoción de lanzamiento (si se financia) con un precio desde 33.900 euros. Con el acabado más alto cuesta desde 44.500 euros.