Ya conocíamos el buen hacer de Volvo en sus modelos más compactos, los V40 y V40 Cross Country, y a decir verdad, gracias a la vanguardista tecnología que embarcan y a su excelente oferta motriz, con tres motores diesel (D2 con 120, D3 con 150 y D4 con 190 CV) y otros tres de gasolina (T2 de 122, T4 de 190 y T5 de 245 CV), su vigencia era y es plena. Sin embargo, la llegada de los exitosos XC90 con su nueva y vanguardista imagen de marca, ha impulsado a los responsables de Volvo a actualizar e imprimir esa nueva imagen en los modelos más accesibles de la casa. El resultado es un coche igual de bueno que antes, capaz de competir con los mejores del segmento, con un precio más bajo que el de aquellos y con una nueva y mucho más atractiva imagen.
Al detalle, encontramos la nueva firma corporativa del fabricante en las ópticas con su característico ´Martillo de Thor´ heredado de la serie 90. Asimismo, la paleta de colores para la carrocería aumenta con cinco nuevos tonos y se crean ocho nuevos tipos de llantas. La gama se articula en tres variantes: V40, R-Design y Cross Country. Dentro hay nuevas tapicerías, inserciones y combinaciones cromáticas.
En cuestiones mecánicas, los ingenieros han ajustado los propulsores para conseguir la máxima eficiencia. En ese sentido destaca la versión diésel D2 con cambio manual, que consigue homologar unas emisiones de solo 89 gr/km de CO2 y un gasto de 3,4 litros por cada 100 km. Las cajas de cambios son en todos los casos, excepto para el gasolina más potente, que es automático de ocho marchas, manuales de seis relaciones. Ese cambio automático de ocho velocidades se ofrece en opción para el diésel de 190 CV y los demás pueden motar otra caja automática de seis marchas.
Otra actualización importante es la del sistema multimedia, cuyas aplicaciones destinadas a la conectividad con ´smartphones´ se han mejorado ampliando sus funciones.
Los acabados son los ya conocidos en la marca: Kinetic, Momentum, Inscription y R-Design. Para el V40 Cross Country se limitan a Kinetic, Momentum y Summum. De serie y en toda la gama encontramos el sistema de audio con pantalla de cinco pulgadas, el climatizador doble, los reposacabezas activos o un airbag especial en el capó para peatones. En el caso de los Cross Country, los que montan los motores de gasolina de 190 y 245 CV se asocian con la tracción total y se le añade el control de descenso de pendientes.
La nueva entrega del compacto sueco ya está en los escaparates de las concesiones de la marca, con unos precios que van desde los 25.650 euros del D2, hasta los 40.605 euros del T5; el V40 Cross Country cuesta entre los 26.950 euros del D2 y los 44.345 euros del T5 AWD.
El éxito de una marca
Volvo ha anunciado un crecimiento global en estos seis primeros meses del año de un 10,5 %. Sin duda, el nuevo todocamino de lujo XC90 ha sido uno de los principales actores de este importante incremento. Pero el modelo más vendido en esta primera mitad de 2016 sigue siendo el XC60 (73.881 unidades); le sigue el V40 (48.760 unidades) y ocupa el tercer lugar el mencionado XC90 (43.911 unidades). En el mercado europeo, Volvo ha aumentado un 9,6 % en estos seis primeros meses respecto al mismo periodo el año pasado.
