La marca sueca nos adelanta cómo serán los nuevos integrantes de la familia 40, que hasta ahora estaba formada por los V40 y V40 Cross Country. Los nuevos prototipos estrenarán una plataforma modular y polivalente -llamada CMA-, algo cada vez más extendido entre los fabricantes de vehículos, que supone una clara mejora desde el punto de vista del diseño y la producción, con dos interesantes propuestas, una de estilo berlina y otra con aires ´SUV´.

Ambos diseños están inscritos dentro del segmento compacto, y señalan el inicio de una ofensiva, por parte del fabricante sueco, en ese tamaño pero con categoría ´premium´. Esta estrategia le permitirá competir con sus refinados adversarios en un plazo de cuatro años, así que uno de ellos comenzará a fabricarse a partir del año que viene.

Está previsto que uno sea puramente eléctrico para 2019, aunque no han trascendido más pormenores; el otro será híbrido enchufable, con la tecnología ´Twin Engine´ ya vista en otros modelos actuales de la firma. El nuevo T5 Twin Engine está basado en un motor de gasolina de tres cilindros, unido a una transmisión de doble embrague de siete relaciones que se acopla a un motor eléctrico, para crear un vehículo compacto con tracción sencilla a las ruedas delanteras.

Más aspectos en los que se hará hincapié en los nuevos integrantes de la serie 40 serán los de la conectividad -una completa e innovadora gama de funciones, según la marca-, un diseño interior más ´escandinavo´ y el paquete de soluciones de seguridad más avanzado del momento.

Estas propuestas de futuro a medio y corto plazo coinciden con un buen momento para la empresa sueca, pues en el primer trimestre del año aumentó sus ventas a nivel global un 11,9 % -120.591 vehículos-, con lo que esperan matricular alrededor de 800.000 unidades al año, frente a las 503.000 del pasado 2015.