En 1985, durante el Salón del Automóvil de Frankfurt, BMW presentó su 325 ´Allrad´ para sorpresa de la prensa especializada. Los probadores de aquel tiempo elogiaron no sólo las posibilidades que se abrían ante este vehículo en condiciones adversas, sino también la elevada motricidad y el dinamismo en tramos revirados.

Desde entonces, treinta años después, aproximadamente uno de cada tres vehículos que la marca vende en todo el mundo montan el sistema de tracción total inteligente xDrive. Pero además de animar a la mayoría de los afamados todocaminos de la firma, la tracción integral se puede encontrar en las demás Series del fabricante, desde el BMW Serie 1 hasta el recién llegado Serie 7. La conjunción de esta posibilidad con la amplia gama de motores (que abarca también a los híbridos con xDrive) hace un total de 110 combinaciones de motricidad 4x4 en 12 Series distintas, sumando el avanzado deportivo i8 híbrido (motor térmico detrás y eléctrico delante) y el nuevo BMW 225xe, totalmente eléctrico y con tracción a las cuatro ruedas.

La tecnología xDrive aumenta enteros el agarre y la típica dinámica de conducción de los vehículos de la firma. Se analiza la conducción en cada momento y, bien por la propia gestión de la tracción total o bien trabajando junto a las ayudas electrónicas, el sistema varía el par que se envía a cada rueda, pero siempre dando prioridad al eje trasero para conservar el tacto de conducción directo y distintivo de BMW.